Estación de esquí

Una corriente de barro obliga a cerrar varias pistas de Sierra Nevada

La borrasca Karlotta y las altas temperaturas provocan este fenómeno natural que ha llevado a desalojar a más de un centenar de personas

Las fuertes lluvias, combinadas con altas temperaturas, han generado una corriente de barro que ha impactado sobre varias pistas de esquí y el complejo de actividades Mirlo Blanco. Esta situación ha provocado que más un centenar de personasque disfrutaban de las instalaciones en ese momento hayan sido evacuadas.

El incidente, iniciado en el ventisquero Morón, se extendió rápidamente a través del área de Cauchiles-Parador, en la zona sur de la estación, afectando directamente a las pistas Maribel, Zaragatillo y el tramo final de El Río, según un comunicado emitido por Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación de esquí. La corriente de barro, de un intenso color marrón, se ha hecho notar a pesar de la densa niebla que cubría la estación, la cual no ha podido operar debido a las "condiciones meteorológicas extremas" que prevalecen.

Entre las áreas más afectadas se encuentra el complejo de actividades Mirlo Blanco, que, a pesar de haber permanecido abierto durante la mañana, ha tenido que cerrar sus puertas como medida de precaución.

La estación ha anunciado que se llevarán a cabo trabajos de reacondicionamiento en las pistas afectadas tan pronto como las condiciones lo permitan. Según ha anunciado la estación de esquí, para mañana está previsto que se puedan utilizar 35 pistas (24 kilómetros en el área de Borreguiles) y 10 remontes.

La estación de Sierra Nevada, que ya había reabierto sus puertas el pasado domingo después de dos días de cierre por fuertes rachas de viento, se ha visto nuevamente obligada a suspender sus actividades. Este cierre, provocado por los últimos efectos de la borrasca Karlotta, ha dejado nula visibilidad en algunas áreas, complicando aún más la situación con fuertes vientos, bancos de niebla y alta humedad.