Sanidad

Moreno arropa a su consejera más cuestionada y presume de inversión

Su gobierno ha dedicado a la innovación sanitaria 680 millones desde 2019, 20 veces más que el último ejecutivo socialista

Juanma Moreno y Catalina García, junto a varios responsables sanitarios en la provincia de Jaén
Juanma Moreno y Catalina García, junto a varios responsables sanitarios en la provincia de JaénLa RazónLa Razón

En plena oleada de críticas por los problemas asistenciales derivados de la alta afluencia a las urgencias por los virus respiratorios, junto a las mejoras laborales que están planteando los sanitarios, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, quiso arropar a su consejera más cuestionada, la de Salud y Consumo, Catalina García, precisamente en su provincia, en Jaén, donde el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha destinado desde 2019 «cerca de 100 millones de euros, casi el triple de lo que se invirtió en los últimos cinco años del gobierno socialista».

Moreno conoció de primera mano el primer PET-TAC y las dos nuevas gammacámaras del Hospital Universitario de Jaén. Allí destacó los casi 680 millones de euros que la Junta ha invertido en la comunidad autónoma desde 2019 en renovación y adquisición de tecnología para el ámbito sanitario. Una cifra que supone «20 veces más que el periodo 2014-2018, cuando se destinaron 32,8 millones».

Del esos cerca de 680 millones, «157 han sido a tecnología que está relacionada con el cáncer», en lo que «supone una apuesta clara» frente a «una enfermedad que es muy dura y muy compleja y que, desgraciadamente, es muy extendida en todo el territorio».

Ello se traduce «en más atención, en menos esperas» para los pacientes y, por tanto, en «reducir el estrés y la inquietud» ante este tipo de exploraciones. «Cuando te dicen que te tienen que hacer un tipo de exploración y uno no sabe lo que tiene, los días previos son muy difíciles. Con lo cual, reducir ese tiempo es dar serenidad, es dar tranquilidad, es dar, en definitiva, un punto de certidumbre y es recortar esa angustia», aseguró.

Moreno resaltó, además, el objetivo de que «estas tecnologías de todo tipo se extiendan por centros de toda Andalucía», con TAC, resonancias magnéticas, mamógrafos de alta resolución, aceleradores lineales, robots quirúrgicos «o equipos tan novedosos como el Gamma Knife», cuya instalación en Granada convirtió a la sanidad pública andaluza «en pionera de España».

«Ingenios que están siendo clave en el aumento de la actividad asistencial en toda Andalucía y un aspecto en el que sé que los equipos directivos estáis trabajando y os animo a que sigáis trabajando para que esa actividad asistencial podamos intensificarla», aseguró el presidente andaluz. En este sentido, apuntó que, aunque queda «mucho por hacer, en toda Andalucía entre enero y noviembre del año 2023 se hicieron un 15 por ciento más de operaciones que en el mismo periodo del 18».

Por todo ello, consideró que en el ámbito de la gestión sanitaria se está «haciendo un trabajo entre todos que es muy positivo» y ello, además, teniendo en cuenta que es el sistema «más potente» del país, «el que abarca más población» y el que cuenta con más presupuesto y profesionales.

Pese a esta realidad, las críticas siguen siendo constantes. El sindicato de enfermería Satse denunció que el SAS «vuelve a poner en vilo» a los más de 7.000 profesionales que finalizarán su contrato a 31 de enero de 2024 y a los que se iban a ofertar contratos de once meses. Tal y como explica la central, hace apenas un mes desde el SAS y la Consejería de Salud y Consumo se anunció la prolongación de estos profesionales mediante un contrato de un mes, que finaliza el 31 de enero, y su posterior continuidad por once meses más. Sin embargo, a principios de esta semana «se da orden de parar esas renovaciones», cuyo llamamiento debía iniciarse el 15 de enero, en espera de una reunión que a día de hoy «no se ha convocado». «No permaneceremos pasivos ante este nuevo ninguneo a miles de profesionales», advirtió.

De otro lado, las inspecciones provinciales de Trabajo y Seguridad Social han comenzando a responder a las denuncias presentadas en toda Andalucía por Satse para analizar los riesgos psicosociales y para la seguridad de los profesionales y pacientes derivados de la «falta» de enfermeras y fisioterapeutas en los hospitales de la comunidad autónoma.