Semana Santa

Renovar la ilusión

El presidente de la Agrupación de Cofradías de Málaga, Pablo Atencia, defiende que los cofrades de la ciudad "nos demuestran año a año su fortaleza, compromiso y amor por la Semana Santa"

Nazarenos de la cofradía del Rescate de Málaga
Nazarenos de la cofradía del Rescate de Málagalarazon

Hace un año, los cofrades de toda Andalucía compartíamos juntos las ilusiones de cara a una Semana Santa que denominábamos del reencuentro. La pandemia aún afectaba al normal desarrollo de nuestras vidas y poco a poco conseguíamos recuperar todo lo perdido con ciertas limitaciones.

Hoy, a Dios gracias, estamos dispuestos a renovar la ilusión ante la que será la Semana Santa de la normalidad. Siete días únicos en los que todos disfrutaremos de un mayor conocimiento tras las experiencias vividas para poder exprimir al máximo una semana que es parte importante de nuestras vidas y nos colma de gozo y alegrías constantemente. Tenemos en nuestra mano la oportunidad única de seguir construyendo juntos el gran proyecto cofrade de Málaga, ofreciendo a la ciudad una realidad social que se traduce en el testimonio público de nuestra fe como cristianos, en el desarrollo y enriquecimiento del patrimonio cultural e histórico, y en la activación de nuestra economía a través del turismo y la generación de empleos.

Es por eso que debemos reconocer siempre el trabajo de todos aquellos que la hacen posible, enfrentados a diario ante un reto permanente y siempre ilusionante: el de los cofrades comprometidos con su semana mayor. Por ello, en Málaga, estamos orgullosos y del trabajo que aquí se realiza. Una ciudad en la que la Semana Santa forma parte de su ADN, un rincón al Sur de Europa que ha sabido mantener su estilo diferenciador y reconstruir sin complejos lo que fue, para ser hoy una realidad ejemplar.

Los cofrades de Málaga nos demuestran año a año su fortaleza, compromiso y amor por la Semana Santa. Como lo llevan haciendo durante siglos, conformando un universo admirable del que siempre tendremos que aprender.

Y yo, de todos ellos, me llevo un gran aprendizaje: el del poder único de la ilusión y la esperanza, dos conceptos que tienen la capacidad de generar a pesar de las adversidades. Ahora, renovamos la ilusión. Y lo hacemos con el gozo de haber vivido una Cuaresma de preparación y una Semana Santa de unión, fe y servicio.