3 razones por las que no estás teniendo sexo (y cómo solucionarlo)

Una vida sexual regular es buena, y recomendable, para nuestra salud. Entonces, ¿por qué permitir una etapa de sequía sexual en nuestra vida de pareja? Hoy hablamos de las 4 razones más comunes por las que una pareja deja de tener sexo y, lo más importante, cómo ponerle solución al problema.

1. Medicamentos que roban el deseo sexual: la píldora, uno de los anticonceptivos más utilizados por las parejas es también una de las primeras causas que minan el deseo sexual en la mujer. Qué ironía. ¿Por qué ocurre esto? Los anticonceptivos orales contienen estrógeno, que aumenta la producción de una proteína llamada globulina, transportadora de hormonas sexuales (SHBG). Las SHBG pueden atrapar la testosterona, de forma que esto podría afectar a deseo sexual de forma negativa.

Solución: hablar con el médico sobre los posibles efectos secundarios sexuales de todos los medicamentos que estamos ingiriendo. Tampoco sería mala idea probar un método anticonceptivo alternativo a la píldora que no utilice hormonas, tales como preservativos o un DIU.

2. Las responsabilidades de la vida diaria: trabajo, horarios, reuniones, recoger a los niños del colegio, cuidar de la familia y ocuparse de todo lo que tiene que ver con la rutina diaria, sumado a la tecnología y a la conexión permanente. Las tensiones crónicas de la vida moderna pueden también desencadenar una cascada de cambios hormonales que afecten al ciclo sexual como respuesta rebelde de nuestro cuerpo. El clásico “estoy agotado”.

Solución: lo primero, relajarse. Por ejemplo, algo tan sencillo como un buen baño de espuma y agua caliente nos aleja de las preocupaciones diarias y nos permite desconectar. Si al agua se le añade algún aceite con aromas agradables, esto ayudará a aumentar las sensaciones sexuales. Y lo segundo, esforzarse. No hay que dejar que el sexo represente algo residual en nuestra vida de pareja y a veces, sobre todo con horarios imposibles, hay que tomarlo como una tarea más, aunque por supuesto, mucho más placentera.

3. Problemas de autoestima: lamentablemente, es algo que afecta más a mujeres que a hombres. Nosotras somos más exigentes con nosotras mismas y en ciertos aspectos, como el amor o el sexo, queremos estar siempre perfectas. Unos kilos de más, transformaciones en nuestro cuerpo como las producidas por un embarazo, etc., no ayudan a sentirnos guapas y sexys.

Solución: en la vida sexual como en la vida misma, si no te gusta algo, debes luchar por cambiarlo. Si crees que te sobran unos kilos, toma medida para que este pesar no te siga anulando. En el momento que logremos gustarnos a nosotros mismos, comenzaremos a proyectarlo. En una encuesta reciente de Health.com, el 37 por ciento de los encuestados dijo que la pérdida de peso les hizo sentirse mucho más atractivos. De hecho, incluso una pérdida de peso de tan solo 3 kilos se ha demostrado suficiente para poner en marcha el deseo sexual.