Estupor entre turistas después de que la policía revelara que un vendedor ambulante preparaba cócteles en el suelo de un aparcamiento

Las autoridades locales han lanzado una advertencia urgente a visitantes y residentes de Mallorca sobre los posibles riesgos para la salud al consumir cócteles comprados en puestos callejeros sin licencia. En una inspección realizada en Platja de Palma el 13 de julio, la Policía Local descubrió a un vendedor preparando sangrías y mojitos en condiciones insalubres, utilizando frutas cortadas directamente sobre una bolsa de plástico colocada en el suelo de un aparcamiento.

El operativo policial detectó que el licor era almacenado en garrafas de cinco litros y se servía en vasos de plástico sin ningún control de higiene. Esta práctica no solo vulnera la normativa sobre venta de alcohol en espacios públicos, sino que también representa un serio riesgo alimentario. Las autoridades ya han abierto expediente ante el Servicio de Seguridad Alimentaria de las Islas Baleares.

El diario Daily Mail, por ejemplo, se hace eco de la sorpresa y la alarma que ha generado esta noticia entre los miles de turistas británicos que estos días llenan las playas de Baleares. En su cobertura, el medio describe las imágenes difundidas por la policía como “viles” y lanza una advertencia directa a sus compatriotas: extremar las precauciones y evitar consumir bebidas de vendedores ambulantes, por el grave riesgo que suponen para la salud.

La Policía de Palma ha difundido imágenes del lugar a través de sus cuentas oficiales, acompañadas de un mensaje contundente: “Consumir solo en establecimientos autorizados”. El jefe del cuerpo local instó a los bañistas a abstenerse de adquirir bebidas en la playa de vendedores ambulantes y a reportar actividades similares para proteger la salud pública.

Este aviso se enmarca dentro de una campaña más amplia para frenar el ocio descontrolado y revalorizar el turismo sostenible en la isla. Las autoridades están reforzando los controles tanto en las playas como en zonas urbanas y están imponiendo restricciones en bares y restaurantes para descongestionar la temporada alta.