Economía

Iberaval reafirma su compromiso contra el cambio climático sin perder calidad en sus servicios

La sociedad de garantía obtiene el Sello de Huella de Carbono que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica, y se marca como reto aminorar un 20% las emisiones de CO2 este año

El presidente de Iberaval, César Pontvianne y el director general, Pedro Pisonero
El presidente de Iberaval, César Pontvianne y el director general, Pedro Pisonerolarazon

Coincidiendo en el día en el que el Gobierno de coalición que conforman PSOE y Unidas Podemos ha dado luz verde en el Congreso de los Diputados a la Ley de Cambio Climático y Transmisión Energética, la Sociedad de Garantía Recíproca Iberaval ha recibido un nuevo e importante reconocimiento que supone un aval a su decidida apuesta por la sostenibilidad del medio ambiente y un espaldarzo a su compromiso en la lucha contra el cambio climático: el Sello de Huella de Carbono.

Una distinción que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que convierte a Iberaval en la primera sociedad de garantía de la España autonómica que consigue este marchamo de calidad que, entre otras cosas, obligará a la entidad que preside César Pontvianne a potenciar aún más si cabe sus esfuerzos en la reducción de emisiones de CO2 en el funcionamiento diario de la sociedad, conformada al inicio de 2019 por 27.300 socios que emitían entre todos más de 53 toneladas de dióxido de carbono (1,94 toneladas por cada mil asociados), según el estudio llevado a cabo por la empresa palentinaOmawa Huella Ecológica, que analizó durante el cuarto trimestre de 2019 los diferentes parámetros que se exigen para calcular la huella de carbono. Un cálculo se ha hecho en base a los datos obtenidos a partir del gasto en combustibles fósiles, como gasolina de los vehículos utilizados por miembros de la organización, consumos de los equipos de climatización y refrigeración u otras energías, como electricidad o gas en las sedes de la sociedad de garantía, según informan fuentes de Iberaval.

Con este punto de partida, la Sociedad de garantía Recíproca se ha marcado como reto seguir reduciendo sus emisiones de CO2 este año en al menos un 20 por ciento y así sucesivamente cada ejercicio durante la próxima década hasta lograr que en el 2030 esta reducción de la contaminación y de los consumos energéticos de sus socios sea como mínimo del 40 por ciento, y llegar a trabajar más pronto que tarde en Carbono Neutro compensando así la Huella de Carbono en su totalidad.

Para ello ya trabaja en en un ambicioso Plan de Reducción para rebajar la emisión propia de gases de efecto invernadero y aportar su granito de arena ante una emergencia mundial, como es el cambio climático, “pero sin perder ni un ápice de la calidad de los servicios que presta Iberaval a sus socios”, apuntan desde la sociedad de garantía, donde reafirman su compromiso con las políticas de Desarrollo Sostenible y Responsabilidad Social Corporativa hecho efectivo al sumarse el pasado año al Pacto Mundial de Naciones Unidas.