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Reconocimiento a doce nuevas empresas por su compromiso con la igualdad y la conciliación

Reciben el distintivo Óptima Castilla y León que ya disponen 109 firmas en la Comunidad

Varios trabajadores recogen la uva de los viñedos de la bodega Pago de Carraovejas, en Peñafiel
Varios trabajadores recogen la uva de los viñedos de la bodega Pago de Carraovejas, en Peñafiellarazon

La apuesta por la igualdad de sexos en las empresas y la conciliación laboral y familiar tiene sus frutos, y especialmente en una sociedad como la actual en la que afortunadamente la mujer está cada vez más presente en el mercado laboral y desempeñando además puestos de relevancia en muchas empresas.

El Gobierno autonómico, bajo la presidencia de Juan Vicente Herrera, implantó hace ya trece años una distintivo, denominado “Óptima Castilla y León”, que tenía y sigue teniendo como finalidad reconocer el esfuerzo de las empresas de la Comunidad en el ámbito laboral y, en la actualidad, son ya 109 las que cuentan con este sello de calidad tras la incorporación de doce nuevas compañías que acaban de recibirlo.

Se trata de las empresas Extrusiones Metálicas S.L.U, de Valladolid; Plena Inclusión Castilla y León de Ávila; Ilunión (empresa de servicios de la ONCE) de León; Faema Empleo, de Ávila; Agencia B12 On Line, de Valladolid; Ase Psike, de Valladolid; Pago de Carraovejas, de Valladolid; Asecal, de Salamanca; RCM Servicios Palentinos, de Palencia; Coluber, de Palencia; Asociación Rosa Chacel, de Valladolid, y Asociación Diversa de León.

Todas estas compañías, nombres importantes en la economía y el empleo de la Comunidad, suman una plantilla de 687 personas, de las cuales 323 son hombres y 364 mujeres.

“Queremos visibilizarlas en el ámbito social, para que puedan servir de referencia a aquellas empresas y entidades cuya trayectoria se define por apostar por la igualdad entre hombres y mujeres y por la conciliación”, destacan desde la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades que dirige Isabel Blanco.

Las 109 empresas que tienen el distintivo -en estos años son 113 las que lo han conseguido pero la Junta puede quitárselo si incumplen algún requisito- han implantado medidas de igualdad integrando la perspectiva de género en la gestión de los recursos humanos de sus empresas.

Asimismo, han puesto en marcha una comunicación y publicidad no sexista así como medidas para ordenar el tiempo de trabajo y han impulsado el teletrabajo y facilitado la conciliación. De la misma forma, han analizado la composición de la nómina para facilitar la igualdad retributiva e impartido formación en igualdad a sus plantillas. Y, finalmente, han formado a las mujeres para promover su promoción en el trabajo y que puedan ocupar puestos en los que están subrepresentadas además de apostar por la prevención acoso sexual y por razón de sexo.

Y todo esto, utilizando las nuevas tecnologías de forma creativa como un instrumento para favorecer la igualdad entre empleadas y empleados.

La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, junto al presidente de CERMI Castilla y León, Juan Pérez Sánchez, en una imagen de archivo antes de la pandemia
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, junto al presidente de CERMI Castilla y León, Juan Pérez Sánchez, en una imagen de archivo antes de la pandemiaMiriam ChacónIcal

Castilla y León, pionera en la igualdad laboral

Castilla y León fue la primera comunidad en España en aprobar una Ley de medidas en el ámbito público y privado encaminadas a apoyar la conciliación de la vida personal, familiar y laboral y de eliminación de la brecha salarial de género. Una Ley necesaria si se tiene en cuenta que en España la brecha de género salarial está en torno a un 20 por ciento, la tasa de paro femenino es superior en cinco puntos a la masculina o que la temporalidad de los contratos femeninos es de un 75 por ciento.

En lo relacionado con la conciliación, el 58 por ciento de mujeres renuncian a su carrera profesional por dedicarse a la familia frente a un 6 % de los hombres, y el 22 por ciento de las mujeres ocupadas ha solicitado la reducción de jornada laboral frente a solo el 3 por ciento de los hombres.