Junta y oposición, cada vez más lejos en Sanidad

No por esperado deja de ser noticia, pero lo cierto es que el deseado y reclamado en numerosas ocasiones pacto por la Sanidad en Castilla y León, no es que se aleje, es que ni está ni se le espera, como suele decirse por estos lares.

Y es que la distancia entre el Gobierno y la oposición socialista en materia sanitaria es casi abismal, y el acuerdo parece cuanto menos una utopía escuchando las intervenciones del presidente Fernández Mañueco y del líder del PSOE, Luis Tudanca, durante el Pleno de las Cortes de este martes.

Este último, acusaba al primero de «vivir en mundo ideal y de cuento» así como de «fingir» que ha dado un golpe encima de la mesa para «aparentar» que el PP no tenía nada que ver con el cierre de consultorios, «cuando la mayoría de los profesionales cree que la Atención Primaria está peor que nunca y siete de cada diez consultorios aún no han recuperado la normalidad que había antes de la pandemia», criticaba. Además, Tudanca echaba en cara a Mañueco que, bajo su mandato, «se está degradando la Sanidad a marchas forzadas» y le afeaba que en el proyecto de Presupuestos la Sanidad sea de las que menos crece, concretamente un dos por ciento.

El presidente no se mordía la lengua y reivindicaba la política de su Gobierno en defensa de la salud de las personas. También destacaba que el próximo año Castilla y León dispondrá delPresupuesto más alto de su historiapara la Sanidady recordaba al líder del PSOE que la asistencia sanitaria que se presta en esta Comunidad está «entre las mejor valoradas» y cuenta con los mayores ratios de profesionales por persona y mantener la mayor red de centros de salud del país.

«Usted (por Tudanca) no puede dar lecciones de nada y menos de dignidad o de Sanidad, cuando no se le conoce ningún modelo ni propuesta para mejorarla», recriminaba Fernández Mañueco al dirigente socialista, a quien recordaba también que su gran aportación a Castilla y León y en el peor momento de la pandemia fue presentar una moción de censura «incalificable».

El jefe del Ejecutivo regional iba más allá incluso en su dúplica cuando acusaba a Tudanca de ser un incoherente por pedir dimisiones cuando el Supremo suspendió cautelarmente el toque de queda que pidió la Junta y callarse ante el fallo del Constitucional tumbando los dos estados de alarma aprobados por Sánchez. «Tudanca ha demostrado con claridad que entre los intereses de Castilla y León y los de Sánchez siempre elige a los de este último», insistía Fernández Mañueco, quien marcaba distancia con Tudanca en materia sanitaria de aquí al final de legislatura: «Cada uno a lo suyo; nosotros a mejorar la Sanidad y usted señor Tudanca a esparcir cizaña».

Pobreza energética

Por otra parte, en un bronco pleno entre los miembros de la Junta y el PSOE, especialmente con la socialista Patricia Gómez, primero con el presidente de las Cortes, Luis Fuentes, quien pidió a esta que retirara sus palabras en una intervención -algo a lo que se negó- en la que acusaba a Fuentes de haber expulsado a la vicepresidente Ana Sánchez de un pleno anterior para equilibrar las fuerzas y que los socios PP y Ciudadanos no perdieran las votaciones tras la fallida moción de censura del PSOE, y después con el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, a cuenta del respeto institucional, con cruces de palabras sobre corrupción, transfuguismo e incumplimiento de los acuerdos, la sesión al menos dejaba algún anuncio importante.

Como por ejemplo, el que hacía la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, de que a partir de la semana que viene la Junta comenzará a ingresar los 130 euros de ayuda frente a la pobreza energética comprometidos para las familias más vulnerables de la Comunidad, 45.000 según la estimación del Gobierno autonómico.

Blanco, además, recordaba en su intervención el anuncio que hacía hace diez días junto a las entidades locales, para abrir una nueva línea de ayudas de emergencia, de ocho millones de euros en dos años, para combatir la pobreza energética y ayudar a las familias más desfavorecidas.

La consejera, asimismo, reivindicaba el trabajo de la Junta para ampliar el convenio con las empresas eléctricas, con el que ya el año pasado se evitó el corte de suministro para 400 familias, y la labor del Gobierno autonómico para evitar 257 desahucios con fondos autonómicos.