Sociedad

Las denuncias en las carreteras de Castilla y León alcanzan su cifra récord el pasado año, al llegar casi a las 600.000

Más de siete de cada diez fueron excesos de velocidad captados por radares

Radar fijo en las carreteras de Castilla y León
Radar fijo en las carreteras de Castilla y LeónIcal

Después de un 2020 marcado por un desplome del tráfico en las carreteras de Castilla y León superior al 26 por ciento como consecuencia de la pandemia y en el que las denuncias también se redujeron notablemente debido a este descenso de la movilidad y a los protocolos sanitarios aplicados por la Guardia Civil a la hora de realizar controles, 2021 se cerró en la Comunidad con un récord histórico de multas de tráfico al alcanzar las 596.917 lejos de las 381.375 del pasado año y por encima de las 553.892 de 2017, la que era la cifra más alta de la serie histórica hasta ahora.

La principal razón de este incremento se encuentra en el comportamiento irresponsable de los conductores. A pesar de estar señalizados, el número de excesos de velocidad denunciados por los radares fijos se incrementa año tras año en las carreteras de la Comunidad. Si en el año 2012 que representaban poco más del 19 por ciento del total de las denuncias (535.295), su número ha ido creciendo paulatinamente. En 2016 fueron 230.171, (41,6 por ciento) y en 2018, 210.567 (49 por ciento). Este porcentaje se situó el pasado año en el 53,1 por ciento del total (317.215).

Pero si a las 317.215 denuncias impuestas por los radares fijos, se suman las casi 120.000 de lo radares móviles, el resultado es que el exceso de velocidad fue el motivo del 73,3 por ciento del total de las sanciones, a pesar de la campañas de la DGT poniendo el acento en que la velocidad es uno de los factores que concurren con mayor frecuencia en la ocurrencia de siniestros viales y que tienen una influencia directa en la gravedad de las lesiones.

Tras el exceso de velocidad, la segunda infracción más común fue conducir sin la ITV en vigor, con más de 48.000 denuncias, que representan el 8 por ciento del total. La mayoría, 44.882 fueron por circular con la ITV caducada, mientras que resto fue por hacerlo con la inspección desfavorable o negativa. En el segundo caso es cuando, además de la denuncia, el vehículo queda inmovilizado por su mal estado, por lo que se debe de solicitar un servicio de grúa para poder trasladar el vehículo al taller. En este caso la posible sanción económica es aún mayor, dado el riesgo que supone para la seguridad vial circular con un vehículo que no reúne las características de seguridad.

En tercer lugar aparecen las multas por no llevar puesto el cinturón de seguridad, con 9.316 (1,56 por ciento del total), seguidas por las sanciones por circular sin carnet o con el permiso retirado por una sanción, con 9.316, y por conducir sin el seguro obligatorio (8.501).

Por conducir utilizando el teléfono móvil se tramitaron 7.865 denuncias; por positivos de drogas, 5.099, por alcohol, 3.912; por el mal estado de los neumáticos, 4.403 y por paradas o estacionamientos prohibidos, 5.778.

En este sentido, el teniente coronel Francisco González Iturralde, jefe del Sector de Tráfico de la Guardia Civil en Castilla y León, explicó que es llamativo el número de denuncias por el uso de dispositivos móviles, que supone una media de aproximadamente 21 denuncias diarias en la Comunidad, a pesar de que la distracción es la principal causa de accidentes con víctimas en España, estando detrás de uno de cada tres accidentes, y que una de las causas de distracción más frecuentes es la manipulación teléfonos móviles durante la conducción.

A este respecto, González Iturralde recuerda que próximamente entrará en vigor la reforma normativa que mantiene en 200 euros el importe de la sanción para este tipo de infracciones aun tan habituales, pero que aumenta la detracción de puntos, que pasa de 3 a 6 en estos casos.

Provincias

Por provincias, Burgos se situó a la cabeza con 112.692 sanciones, seguida por Valladolid, con 83.084 y León, con 78.093. En el otro extremo aparece Ávila con 36.487, seguida por Palencia (36579), Soria, (47.486) y Zamora (67.894). En las carreteras salmantinas se tramitaron 62.828 denuncias y 71.774 en Segovia.

En cuanto a radares fijos, Burgos también se situó en cabeza con 54.592 multas, por delante de Zamora (51.947), León (45.029) y Segovia (41.498). Por el contrario, Ávila fue la provincia con menos denuncias por radares con 15.905, seguida de Palencia (18.552), Soria (23.910), Salamanca (28.911) y Valladolid (36.871).

Delitos

Además de las denuncias, durante el pasado año el Sector de Tráfico de la Guardia Civil también detuvo o investigó a 1.922 conductores por delitos relacionados con la seguridad del tráfico, una cifra ligeramente inferior a la registrada en 2019, cuando se alcanzaron los 2.016, y un 27,7 por ciento más que en 2020.

Aunque la conducción bajo los efectos del alcohol continúa siendo la primera causa de este tipo de delitos y suponen casi la mitad de los mismos, con 870, lo que representa el 46,04 por ciento, cada vez son más las personas investigados por conducir sin carné, por no tener el permiso en vigor o por hacerlo sin haber obtenido nunca el mismo. Así, el pasado año se investigó por este delito a 777 conductores, lo que supone el 40,4 por ciento del total de los delitos contra la Seguridad Vial.

De estos 777 investigados, 451 fueron por conducir habiendo perdido todos los puntos del permiso, 232 por manejar un vehículo sin haber obtenido nunca el carné; 90 por hacerlo después de haberlo perdido cautelarmente por una sentencia judicial y en nueve casos se trataba de personas que fueron sorprendidas conduciendo a pesar de haber sido privadas definitivamente de la licencia por decisión judicial.

Además, se iniciaron diligencias penales a 42 conductores que se negaron a someterse a la prueba de alcoholemia; 46 por exceso de velocidad, 41 por conducción temeraria, 16 por positivos en controles de drogas, 22 por dobles positivos en drogas y alcohol,18 por delito de conducción. temeraria con manifiesto desprecio por la vida de los demás y siete por delito de grave riesgo para circulación.