Sociedad

Vendimia Solidaria 2021 de Abadía Retuerta, la consolidación de un vino solidario y artístico

La Fundación Intras protagoniza esta acción que se ha consolidado como un referente

Vendimia solidaria de Abadía Retuerta
Vendimia solidaria de Abadía RetuertaAbadía Retuerta

Por octavo año consecutivo, la prestigiosa bodega del valle del Duero lanza la nueva añada de su vino más comprometido, Vendimia Solidaria 2021, y con ella la segunda edición vinculada al arte.

Vendimia Solidaria es una iniciativa puesta en marcha en 2014, que tiene como finalidad poner en valor el compromiso de asociaciones y fundaciones que velan y favorecen el desarrollo comunitario de colectivos en riesgo de exclusión social. Una responsabilidad social que también comparte la prestigiosa bodega Abadía Retuerta, para quien la solidaridad es uno de los pilares que sustentan su proyecto vinícola. Pero también concibe el arte como un mecanismo clave para transmitir ideas y valores, y así lo ha querido reflejar en la etiqueta de Vendimia Solidaria 2021.

En esta ocasión, la artista Marina González Guerreiro ha sido la encargada de crear una serie de seis azulejos que forman parte del mural mayor ‘Un Año’ y que simbolizan un calendario de 2022. El proceso creativo de la pieza nace de la observación de los ciclos de la naturaleza y su riqueza, que provee de alimento y crea comunidades, y su composición alude a la vocación sostenible intrínseca de Abadía Retuerta.

Este año, la Fundación Intras, una institución sin ánimo de lucro que acompaña a las personas con problemas de salud mental en la recuperación de sus proyectos de vida por medio de acciones formativas y orientación para la inserción laboral, protagoniza Vendimia Solidaria 2021.

En la pasada vendimia de 2021, un equipo de trabajo de esta organización fue contratado por Abadía Retuerta para colaborar en la recogida de la uva, la época de más trabajo de la bodega. Como fruto de esta labor vio la luz un vino elaborado de manera íntegra por la variedad Syrah y mediante una maceración carbónica. Un proceso de elaboración de vino muy delicado, que requiere de una gran dedicación y con el que se consigue un vino muy aromático y fresco. Los fondos recaudados con esta acción conjunta son destinados íntegramente a esta entidad de interés social y sin ánimo de lucro.

Para Ana Hernández, directora de Personas & Organización de Abadía Retuerta, la iniciativa Vendimia Solidaria “es nuestro proyecto más comprometido y enriquecedor en ambos sentidos. Porque además de favorecer la integración laboral de personas en riesgo de exclusión social aprendiendo un oficio, el equipo de Abadía Retuerta se vuelca también en su formación dejando atrás cualquier tipo de diferencia. Para nuestro equipo más que unos días de trabajo es una gran vivencia”.

Consolidación de un proyecto social

Desde que en el año 2014 la reconocida bodega situada en la plena Milla de Oro del valle del Duero, Abadía Retuerta, iniciase esta andadura social, diferentes proyectos solidarios promovidos por asociaciones y fundaciones locales de la provincia de Valladolid se han realizado. Proyectos con alma, donde el compromiso, el esfuerzo y la colaboración van de la mano.

Ese primer año, Abadía Retuerta colaboró con Fundación Personas, enfocada a la inclusión de personas con discapacidad intelectual, quienes recibieron la donación en forma de un vehículo. Al año siguiente, en 2015, la reconocida bodega vallisoletana contó con la colaboración de Fundación RedIncola, una entidad que apoya a las personas más vulnerables, principalmente a la población inmigrante. A través del proyecto “Conectando personas, creando oportunidades” recaudó dinero para la creación de becas escolares, para la ayuda de la compra de libros de textos y matrículas de colegio.

Para la tercera edición, de 2016, La casa de Juventud Aleste estrechó lazos con Abadía Retuerta bajo el lema “Somos dueños de nuestro futuro”, en la que jóvenes sin recursos y en situación de exclusión de la zona Este de Valladolid ayudaron en la temporada de la recogida de la uva. Desde la bodega recibieron un apoyo económico para impulsar un programa socioeducativo con el objetivo de crear más puestos de educadores y crear material escolar y libros de texto.

Fundación Cauce fue la entidad que dio nombre a la cuarta edición de la Vendimia Solidaria. Su lema “Encauza tu futuro” dominó este proyecto solidario al que se destinó íntegramente el dinero recaudado y que fue destinado al desarrollo de talleres para la búsqueda activa de empleo y habilidades sociales.

En 2018, el trabajo que realiza la fundación Juan Soñador fue la organización elegida para la quinta edición. Por medio del proyecto, “Tierra Viva Catering” y con el mensaje “Tú eres el futuro”, se pusieron a la venta 1.250 botellas de vino 100% Cabernet Sauvignon. Y la recaudación final fue entregada durante el 2019, para que jóvenes en situaciones de precariedad y de exclusión social tengan la formación adecuada para incorporarse al mundo laboral.

En 2019 El Puente Salud Mental de Valladolid fue el protagonista de su sexta edición. Con el emblema que les singulariza “El ‘puente’ hacia un futuro profesional” mejoran la calidad de vida de personas con problemas de salud mental y la de sus familiares.

Y en 2020 la Fundación Kumen, en colaboración con la asociación REDMADRE de Valladolid, fue la organización colaboradora en la séptima edición. Una entidad que fomenta el crecimiento de los valores humanos y éticos en las personas con especial atención a la infancia y que, a través de REDMADRE, apoyan a familias con productos de primera necesidad en su día a día. La recaudación total por la venta de Vendimia Solidaria 2020 fue de 11.863 euros.

Compromiso e implicación A esta iniciativa solidaria también se han sumado y de manera altruista la artista Marina González Guerreiro con el diseño de la etiqueta, el estudio de diseño y fotografía Iglesias Comunicación, la empresa Mata Digital quien se ha encargado de la impresión de los tarjetones, la empresa Biolid que son quienes han impreso las etiquetas; la empresa Verallia quienes han fabricado las botellas; los corchos han sido a cargo de Baruque y las cápsulas de la empresa Ramondin.