Política forestal

Castilla y León se situará en la vanguardia tecnológica para luchar contra el fuego

Fernández Mañueco confirma que se duplicará el presupuesto del operativo y dará estabilidad a los trabajadores y pide a la oposición dejar de usar los incendios como arma arrojadiza

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, comparece a petición propia ante el pleno de las Cortes para hablar de los incendios forestales de este verano
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, comparece a petición propia ante el pleno de las Cortes para hablar de los incendios forestales de este veranoRubén CachoAgencia ICAL

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco,ha comparecido esta tarde en las Cortes a petición propia para dar explicaciones sobre la política forestal de su Ejecutivo en este complicado y catastrófico verano en Castilla y León, con más de 80.000 hectáreas calcinadas, 55.000 de ellas en la provincia de Zamora en dos de los más grades incendios de historia reciente de España, y tres personas muertas.

Fernández Mañueco ha aprovechado su intervención inicial ha pedido a los grupos de la oposición no utilizar la política forestal como arma arrojadiza para tratar de sacar réditos políticos. “Apaguemos el fuego de la confrontación política”, decía en su primera intervención el jefe del Ejecutivo autonómico, mientras tendía la mano a todos para alcanzar acuerdos.

Mañueco confirmaba quese va a aumentar considerablemente el presupuesto para el operativocontra incendios con el que se va a mejorar el equipamiento de extinción y salvamento así como las condiciones laborales de los trabajadores, como se ha acordado en el Diálogo Social.

“Mejoraremos la respuesta ante cualquier problema, las 24 horas del día y durante todo el año con estabilidad laboral para los más de 4.500 profesionales que forman parte del dispositivo en la época de riesgo máximo.

El jefe del Ejecutivo regional anunciaba también la creación de una nueva plataforma tecnológica de gestión de la información de las emergencias por incendios forestales, con un nuevo departamento ligado al Centro de Defensa contra el Fuego (CDF), con sede en León, integrado por expertos, que mejore la seguridad y el trabajo de todo el personal vinculado al operativo, y avanzaba una mayor colaboración con el Centro de Servicios Forestales de Soria (CESEFOR).

También se actualizará el Plan 42 que arrancará en 2023 para la prevención integral de los incendios forestales, actuando sobre el origen y las causas no naturales que motivan la mayoría de los incendios.

De la misma forma, Mañueco afirmaba que recurrirán a simuladores informáticos para conocer el tipo de combustible existente en cada zona y con información meteorológica avanzada de radiosondeos en tiempo real, para lo que colaborarán con el sistema Copernicus de la Comisión Europea.

Asimismo, apostaba también por la creación de nuevos parques comarcales, de la mano de las diputaciones, “para llegar más rápido a los fuegos” y no entorpecer la labor de los operativos en los montes.

Igualmente, reafirmaba el compromiso con la formación del personal, y recordaba al respecto los65 millones de euros para ayudar a los municipios afectados por el fuego, o la la línea de ayudas por valor de 35 millones de euros para mejorar la dotación de los servicios de prevención, extinción de incendios y salvamento, ampliables en diez millones en los próximos cinco años.

Por otro lado, el presidente de la Junta reclamaba también un mayor esfuerzo al Gobierno de España, a través de la mejora, actualización y ampliación de los medios aéreos del Ministerio, y volvía a exigir a Pedro Sánchez, como ya hiciera en julio, que convoque unaConferencia de Presidentes para debatir sobre política forestal “porque es un problema global que afecta a toda España”.

“Estamos ante un problema que es global y que, por tanto, requiere de una solución igualmente global”, decía.

Por otra parte, hacía referencia a la necesidad de reformar el modelo de financiación autonómica y que en él se tenga en cuenta en el reparto a las regiones que, como Castilla y León, tienen una mayor superficie forestal. Si bien, y mientras esta reforma llega, Mañueco reclamaba un fondo específico para las Comunidades Autónomas para luchar contra las llamas.

Finalmente, pedía también al Gobierno de España una mejor gestión forestal, medidas que favorezcan la presencia humana en el campo y en los montes y que ayuden a fijar población en los pueblos. Y ponía como ejemplo, aprovechar más y mejor los recursos endógenos de cada territorio, como la micología o la apicultura y, sobre todo, la ganadería extensiva, “que tiene un papel crucial” en ello, apuntaba.

Desde la oposición, agradecía a Mañueco su comparecencia en el parlamento para dar cuenta de la gestión forestal, aunque también le atacaban y pedían responsabilidades. Por un lado, el procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, le llamaba “cobarde e irresponsable”, por el operativo montado este verano; Luis Mariano Santos, de la UPL, le exigía que, al menos, pidiera perdón por este operativo; y Pablo Fernández, de Unidas Podemos, le echaba en cara que el hecho de que haya anunciado que va a duplicar el presupuesto para la extinción y prevención supone una enmienda a la totalidad de su política forestal, además de acusarle de haber reconocido la incapacidad de la Junta para apagar los fuegos.

El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León, Luis Tudanca, interviene durante el pleno del debate de investidura
El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León, Luis Tudanca, interviene durante el pleno del debate de investiduraPhotogenic/Claudia AlbaEuropa Press

Pidan perdón y váyanse

El más crítico con la política forestal de la Junta era el socialista Luis Tudanca, quien volvía a pedir el cese de l consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones. También echaba en cara a Mañueco que en su intervención haya “doblado la rodilla” y reconocido que se equivocaron.

“Hoy, afortunadamente, Castilla y León gana y usted pierde”, decía el portavoz del PSOE, quien afeaba al presidente que si no se hubieran producido estos graves incendios y no hubiera visto su pellejo en peligro, no se habría cambiado nada.

El dirigente socialista aseguraba que la Junta es responsable de lo ocurrido y de que no hubiera medios, afeaba a Mañueco que estableciera el peor operativo de España y que no declarase riesgo elevado en junio en contra de lo que hicieron en el resto del país ante las previsiones que había de calor y altas temperaturas y de humedad. “Son unos irresponsables”, decía Tudanca, a la vez que echaba en cara al presidente su falta de autocrítica y que ahora pida mano tendida y alcanzar acuerdos “cuando desde 2009 han rechazo hasta ochenta propuestas del PSOE en las Cortes para ampliar y mejorar el operativo contra incendios durante todo el año”.

Tudanca continuaba reprochando a Mañueco que haya reconocido que su dispositivo contra el fuego era precario y que es necesario duplicar la inversión. Lo cual, en su opinión, supone un reconocimiento de culpa. “Solo falta que pidan perdón y se vayan”, finalizaba.

Orgulloso del operativo

Mañueco contestaba después a Tudanca que el 17 de julio, el día en el que mureron dos personas en el incendio de Losacio, en Zamora, a las que luego se sumó otra más que murió días después, no se le olvidará nunca.

El presidente lamentaba que la oposición, y especialmente el PSOE, quiera sacar tajada política de la tragedia y que siga anclada en los ataques y el barro porque solo les importan echar más leña al fuego.

El Jefe del Ejecutivo autonómico defendía el operativo contra el fuego, del que además se sentía orgulloso por su buen hacer apagando conatos, antes de que se queme una hectárea, cuyo porcentaje se ha elevado al 67 por ciento, e insistía en que este funcionó, pero que enfrente tuvieron una situación climatológica extrema y sin precedentes, con un calor extremo y una intensidad y velocidad nunca antes conocida, con llamas “voraces” que llegaron a avanzar mil hectáreas por hora.

Mañueco reprochaba a los socialistas que en otras regiones donde se produjeron fuegos importantes, como la Comunidad Valenciana, Castilla-La mancha o Baleares, gobernadas por el PSOE, la culpa ha sido del cambio climático, mientras que en Castilla y León, la culpa de los fuegos es de la gestión de la Junta. Además, afeaba a Tudanca que haya desobedecido por una vez a Sánchez, cuando este dijo que había que sacar los incendios del debate político. “Para una vez que no le hace caso, es para atacar a Castilla y León”, decía el presidente.

Mañueco también se preguntaba por la utilidad de la comisión de investigación en las Cortes cuando ya han dado explicaciones y las causas están claras, por lo que cargaba contra el PSOE “porque solo les interesa que haya ruido y mantener vivos los rescoldos de los incendios y hacer política de la tragedia.

Finalmente, y respecto a las críticas por no haber elevado a riesgo alto en junio el operativo, el presidente explicaba que de 13 al 19 de junio había un 84 por ciento de medios incorporados en el operativo. El 94 por ciento del total de agentes medioambientales; el 95 por ciento de autobombas propias o el 78 por ciento de los medios aéreos.