Tribunales

A la cárcel por apropiarse de 52.000 euros de su tía abuela horas antes de morir

El Supremo ratifica la condena de dos años y tres meses a este hombre fue al banco y ordenó la transferencia mientras su familiar agonizaba

Fachada del Tribunal Supremo
Fachada del Tribunal SupremoEmilio NaranjoAgencia EFE

Dos años y tres meses de prisiónpara un hombre por apropiarse de 52.000 eurosde su tía abuela mientras ella agonizaba en un hospital de Palencia.

El Tribunal Supremo ha confirmado esta pena para este individuo rechazando así el recurso que había presentado contra la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León que ratificó otra de la Audiencia de Palencia por un delito de apropiación indebida.

Los hechos sucedieron el 8 de febrero de 2017, y la mujer perdió la vida apenas unas horas después de la transferencia bancaria que realizó sin su consentimiento, haciendo uso de la autorización que ella le había hecho para operar en su cuenta pero “sin contar con su necesario consentimiento”, según reza la sentencia.

El hombre fue al banco por la mañana y ordenó una transferencia de 52.000 euros desde la cuenta de la mujer a la suya.

Además, el Alto Tribunal ratifica la multa de 2.400 euros y la devolución de los 52.000 euros que se apropió, informa Efe.

Dice la resolución también que “las circunstancias médicas de la mujer eran conocidas” por el condenado, quien había estado aquella mañana en el hospital donde le fue comunicado el previsible fatal desenlace del estado de su tía abuela, la cual falleció horas después.

Según su testamento, las herederas por partes iguales eran sus dos sobrinas carnales, una de ellas la madre del condenado.

En su recurso, el condenado defiende que la operación bancaria estaba autorizada por parte de su tía abuela a través de una donación, por lo tanto disponía de consentimiento.

Pero el Supremo responde que ha quebrantado el deber de confianza para con su mandante que le ha autorizado a realizar disposiciones de su cuenta, y lo hace ingresándolo en una cuenta de su titularidad cuando ella “se encontraba agonizante”.

Además, la Sala valora las circunstancias en las que fue internada, la edad, 89 años, y deduce que “no parece razonable pensar fueran las propias de quien puede consentir que se extraiga todo lo que le quedaba de capital dinerario, más y en una situación de sedación como la que suele producirse en este tipo de internamientos”, por lo que rechaza que fuera una donación.