Política
Blanco: "El Gobierno feminista de Sánchez es el que más ha desprotegido a las mujeres"
La vicepresidenta arremete contra el Ministerio de Igualdad y su titutlar Ana Redondo por el "escándalo" de las pulseras
El escándalo de las pulseras de protección a las mujeres víctimas de violencia de género sigue salpicando al Gobierno de Sánchez y a su ministra de Iguadad, la reprobada Ana Redondo, mientras se siguen conociendo sentencias que demuestran que hubo fallos masivos y que desmienten y desenmascaran a la ministra y al Gobierno que se considera como el más feminista de la historia, después de haber beneficiado a más de un millar de agresores sexuales con la Ley del Solo sí es Sí
En Castilla y León no dan crédito a lo que está sucediendo, y así lo ha puesto de manifiesto este viernes la vicepresidenta de la Junta, Isabel Blanco, quien ha arremetido contra Sánchez y su equipo por este y otros asuntos que también afectan a las mujeres. "Es el Gobierno que más ha desprotegido a las mujeres en este país", decía esta mañana la también consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, quien ha asegurado también que el ministerio de Ana Redondo es el que más ha recortado derechos de igualdad.
Blanco afirmaba que están tratando de ocultar el escándalo de las pulseras además de cambiar de versión en varias ocasiones. "Primero dijeron que no había ninguno de estos dispositivos que hubiera fallado y luego que eran unos pocos, pero la realidad es que las mujeres hoy en día se sienten desprotegidas", advertía la vicepresidenta.
Blanco recordaba que el Gobierno de España ha sido avisado por los órganos judiciales, por las fiscalías, por las diferentes asociaciones y, aún así, "no ha hecho nada para proteger a las mujeres y se ampara, como siempre, en que todo son bulos".
La vicepresidenta aseguraba que la obligación de las administraciones es trabajar para que las mujeres estén protegidas, para que no se revictimicen y para que se sientan seguras,. Por ello, apuntaba que seguirán denunciando las permanentes "chapuzas" de este Gobierno.
Aparte de los beneficios a los agresores sexuales con la ley del sólo sí es sí y los fallos de las pulseras, Blanco hacía referencia también a oros errores del Ministerio de Igualdad que han hecho daño a las mujeres, como la aprobación el verano pasado de la ley de paridad, que al parecer contenía "un error técnico" que facilitaba el despido de las personas que pedían medidas de conciliación en las empresas.
"Tuvieron también que rectificar", decía Blanco, mientras criticaba igualmente la reducción de la financiación a las comunidades autónomas del cien por cien al 75 por ciento.
"Esta es la realidad que estamos viviendo y lo que está pasando ahora es todavía más grave si cabe porque desprotege a las mujeres víctimas de violencia machista y a los hijos menores que dependen de ellas", finalizaba.
Atención residencial
La vicepresidenta y consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades se expresa de esta forma antes de asistir a la celebración del 30º aniversario de la entidad Lares, que agrupa residencias sin ánimo de lucro y que ya ha formado a 800 profesionales para que se adapten al nuevo sistema de cuidados en centros.
Allí, recordaba que desde que se aprobó la nueva Ley de Atención Residencial el año pasado, la red de centros residenciales de Castilla y León se ha transformado y adaptado a un nuevo modelo de atención centrado en la persona, más humano, que convierte las instalaciones en la continuidad del hogar y de la vida cotidiana del usuario y, sobre todo, que coloca a este en el centro de la toma de decisiones.
En este proceso, aseguraba Blanco que ha tenido y tiene un papel clave Lares Castilla y León, fundamentalmente a través de la formación de profesionales. La número dos del Gobierno autonómico ha felicitado a Lares, a sus 87 centros en la Comunidad y a sus más de 4.000 profesionales por sus tres décadas de compromiso y trabajo en el cuidado de más de 6.500 castellanos y leoneses pertenecientes a los colectivos más vulnerables, como personas mayores y dependientes.
La Junta y Lares Castilla y León llevan tras de sí una larga trayectoria de trabajo conjunto. En 2023 firmaron un protocolo de colaboración, en el que también participó Acalerte, para impartir formación específica y capacitación de los profesionales para la progresiva adaptación de los centros residenciales al nuevo modelo de atención. Desde esa fecha, la entidad ha impartido 27 cursos, en los que se han formado 800 profesionales, entre las personas que atienden a los mayores de manera directa y directores y gerentes de los centros.
El objetivo no es otro que estos trabajadores se aclimaten a una nueva forma de entender los cuidados de larga duración, tanto desde el punto de vista organizativo —instalación de unidades de convivencia— como de la concepción del propio centro, ahora ‘multiservicios’ abiertos a la sociedad, que facilitan el desarrollo de los proyectos de vida y que sitúan a la persona en el centro.
Este modelo de atención centrado en la persona debe implantarse en todas las residencias, públicas y privadas, las cuales se tienen que adaptar al sistema de unidades de convivencia. La Junta ya ha venido instaurándolo en los centros de Burgos, León, Palencia, Segovia, Soria y Valladolid, pero también en las residencias de nueva generación de Salamanca, Zamora —en marcha en 2026— y la futura de Ávila. Ello responde al compromiso del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, de brindar a los mayores y dependientes una atención y asistencia de calidad.
No en vano, lo que arrojan las cifras es que Castilla y León tiene la mejor tasa de cobertura de España en cuanto a plazas residenciales para personas mayores—un 7,69 % frente al 4,08 % nacional y un 80 % con financiación pública— tal y como arrojan los informes que elabora la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales.
De hecho, en el último Índice DEC, los Servicios Sociales de la Comunidad se situaron a la cabeza con una nota de 7,73 sobre 10, la mayor de toda su historia y que superó holgadamente al 5,46 del conjunto del país. De esta puntuación se desgrana también que Castilla y León es la primera en cobertura de plazas residenciales con financiación pública para mayores de 75 años, un 11,82 % frente al 5,89 % nacional, es decir, el doble. Y lo mismo sucede en residencias para personas con discapacidad: un 4,55 % de tasa de cobertura frente al 1,72 % del conjunto de España.
Libre de sujeciones
Los centros residenciales sin ánimo de lucro con los que cuenta Lares en Castilla y León no sólo avanzan en la implantación del nuevo modelo de atención impulsado por la Junta, sino que también continúan implantando un sistema de cuidados libre de sujeciones, filosofía compartida y promovida por el Ejecutivo autonómico. De hecho, la residencia que la Fundación Hospitalarias tiene en Burgos y que gestiona la entidad ha recibido, por parte de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores, la placa que acredita que el centro cumple con su programa ‘Desatar’ y no utiliza ningún sistema que implique sujetar a alguno de sus residentes. Se trata del quinto centro de la Comunidad que obtiene dicho reconocimiento, ligado a la salvaguarda del bienestar de las personas sin minar su dignidad.
Soledad no deseada
Además de los servicios de atención y cuidados a las personas mayores y en situación de dependencia, y de la formación de profesionales, Lares Castilla y León colabora con la Junta en la lucha contra la soledad no deseada. Concretamente, los centros residenciales de la entidad son puntos de encuentro donde se detectan y atienden casos de personas en esta situación. Aunque también forma parte de la ‘Red amiga’, centrada en la ayuda a estos castellanos y leoneses y que viene recogida en el ‘Plan de acción de Castilla y León contra la soledad no deseada y el aislamiento social’.