Economía

Los Colegios de Ingenieros de Zamora y Salamanca reconocen la labor de Iberdrola en el 0 energético

Este reconocimiento se debe al importante papel que desempeñaron las centrales hidroeléctricas y los trabajadores para restaurar el servicio de manera eficiente y rápida

Los Colegios de Ingenieros de Zamora y Salamanca reconocen la labor de Iberdrola en el 0 energético
Los Colegios de Ingenieros de Zamora y Salamanca reconocen la labor de Iberdrola en el 0 energéticoIberdrolaIberdrola

Los Colegios de Ingenieros Técnicos Industriales de Zamora y Salamanca han reconocido públicamente a Iberdrola por su destacada labor en la reposición del suministro eléctrico tras el 0 energético ocurrido el pasado 28 de abril.

Este reconocimiento se debe al importante papel que desempeñaron las centrales hidroeléctricas y los trabajadores de Iberdrola en Zamora y Salamanca para restaurar el servicio de manera eficiente y rápida.

Las centrales hidroeléctricas de Aldeadávila y Ricobayo, la primera en el Duero y la segunda en el Esla, fueron piezas clave en el puzzle de reactivación del suministro eléctrico, gracias a su capacidad de arranque autónomo -o arranque en negro-, es decir, que pueden ponerse en marcha y funcionar sin ningún apoyo externo. Salamanca y Zamora fueron de las primeras provincias en recuperar el servicio eléctrico, apenas tres horas después del cero energético.

Los decanos de los Colegios de Ingenieros Técnicos Industriales de Zamora y Salamanca, José Luis Merchán y José María Collantes, respectivamente, han sido los encargados de entregar una placa conmemorativa a los directores de la central hidroeléctrica de Ricobayo, Francisco Sánchez, y de Aldeadávila, Clodoaldo Rodríguez, en presencia del jefe de la Cuenca del Duero, Ramón Delpuy, en las instalaciones que han albergado durante décadas el Laboratorio de Hidráulica de Iberdrola, una referencia mundial en el campo de la ingeniería junto a la presa de Ricobayo.

Éste se ha transformado recientemente en un proyecto pionero: un centro de innovación y formación por el que pasarán anualmente cerca de 1.000 futuros profesionales de todos los rincones de España.

Iberdrola quiere seguir manteniendo el pulso y el contacto con la comunidad autónoma y con todas las partes implicadas y para ello ha apostado con este centro de formación por retener y atraer el talento joven. Vuelve así a sus orígenes de la mano del futuro, el talento y la innovación.

El hito de los Saltos del Duero

La apuesta de Iberdrola por las energías limpias comenzó con la construcción de los Saltos del Duero. El caudaloso río ocultaba, en su tramo inferior, un tesoro en forma de energía. Fue el ingeniero José Orbegozo quien, después de estudiar el río y vislumbrar la totalidad del cañón, se dio cuenta de las enormes posibilidades del tramo internacional y de la magnitud del proyecto.

Consistía en construir saltos poderosos que aprovecharan la fantástica caída del agua y crear grandes embalses en los ríos Esla y Tormes. Estos permitirían regular el caudal y garantizar la producción de las centrales que se instalasen aguas abajo, tanto en el tramo nacional como en el internacional del Duero, que —en la misma frontera entre España y Portugal y a lo largo de 160 kilómetros de curso— ofrecía un desnivel de 400 metros. Este proyecto representa uno de los hitos más importantes en la historia ya más que centenaria de Iberdrola.