Esperando a Feijóo para sacar al lobo de su "sobreprotección"

El Gobierno de Castilla y León, en general, pero el medio rural y la ganadería, en particular, están contando los minutos y los segundos que faltan hasta el próximo 23 de julio para que se celebren las elecciones generales y el popular Alberto Núñez Feijóo puedan convertirse en nuevo presidente del Gobierno de España.

Y es que el dirigente gallego lleva en su programa electoral que si gobierna restablecerá la situación de protección del lobo que había antes de 2021 cuando el Ejecutivo de Sánchez decidió incluir a este animal en el listado de especies protegidas (Lespre) prohibiendo así su caza controlada también al norte del río Duero, donde se concentra el 95 por ciento de la población de lobos en las regiones de Castilla y León,Cantabria, Asturias y Galicia.

«Esperamos que el futuro Gobierno no haga política desde los despachos sino desde y para el territorio y conozca la realidad del medio rural», decía ayer el consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante su participación este miércoles en el Comité de las Regiones, en Bruselas, en un debate sobre coexistencia de la ganadería y grandes carnívoros de Europa, donde advertía una vez del daño que esta «sobreprotección» del lobo en España está provocando a la vida en el mundo rural.

En este sentido, señalaba que el pasado año aumentaron los ataques de lobos a rebaños un 20 por ciento y murieron más de 5.000 cabezas de ganado de explotaciones ganaderas de la Región, mientras los ganaderos se quejan de que pierden mucho ganado devorado por estos animales.

«Si nada cambia tras las elecciones y seguimos con el actual marco de protección será un desastre para la economía y la sociedad española y una debacle para el medio rural y para el abandono de la ganadería, además de que anidarán de forma mucho más grave los incendios forestales y va a haber un empobrecimiento de la ruralidad en España y de nuestra capacidad de producir alimentos de calidad», alertaba el consejero de Medio Ambiente.

Igualmente, criticaba que Castilla y León no encuentre apoyo en sus demandas en el Gobierno español y se tenga que apoyar en Rumanía y en los once estados miembros que apoyaron flexibilizar el régimen jurídico europeo de los grandes carnívoros, y defendía que las Comunidades Autónomas recuperen al norte del Duero la gestión del lobo «para buscar el equilibrio con esta especie y la ganadería», para, posteriormente, impulsar un debate sobre la reforma de la directiva europea.

Y, al respecto, recordaba que el Parlamento Europeo ya pidió estudiar la flexibilización de esta normativa para reducir el conflicto y los daños en la ganadería extensiva por grandes carnívoros.