Economía

Pedro Palomo apuesta por una "armonización fiscal a la baja" entre autonomías

El presidente de Empresa Familiar participa en un foro de la Fundación Schola y el Foro de Empresarios, donde pide eliminar el Impuesto de Patrimonio por "anacrónico"

Pedro Palomo junto a Ramón Mateos, durante el foro de la Fundación Schola y el Foro de Empresarios
Pedro Palomo junto a Ramón Mateos, durante el foro de la Fundación Schola y el Foro de EmpresariosRubén Cacho/Ical

El presidente de Empresa Familiar Castilla y León y del Grupo de Empresas de Octaviano Palomo, Pedro Palomo, abogó hoy por una “armonización fiscal” entre las comunidades pero “a la baja". "No comparándonos con otras autonomías peores sino mejores”. Palomo reclamó un entorno adecuado para el desarrollo empresarial, sin ataques al tejido productivo desde los poderes públicos y con una “fiscalidad proporcionada” que favorezca la inversión y la generación de empleo en un contexto complicado por la inflación, que ha disparado los costes de producción. Aseveró que es preciso eliminar el Impuesto de Patrimonio por “anacrónico” y una deflactación fiscal.

Pedro Palomo, que ofreció la conferencia ‘Octaviano Palomo: El éxito de tres generaciones’ en una jornada organizada por La Fundación Schola y el Foro de Empresarios, trasladó a Ical que, en el contexto actual, con el coste disparado de materias primas, las empresas han visto muy reducidos sus beneficios y viven dificultades, mientras las cuentas públicas han subido sustancialmente en ingresos por los precios, y “debería acompasarse” a través de una “deflactación fiscal, para que no todo recaiga en las empresas”.

El alto ejecutivo defendió que el Estado “debería adelgazar su estructura” y considerar que las empresas para ser “más competitivas” requieren de los “recursos disponibles”. Asimismo, en un “momento de dificultades”, requirió un marco legal de apoyo al tejido productivo por que las empresas “somo el motor del crecimiento y una parte importante del Estado del Bienestar”. “Necesitamos un entorno apropiado”, sentenció, para insistir en que “no se puede cargar el tema impositivo en la empresa, que sufre un esfuerzo fiscal por encima de la media europea, lo que al final lastra el crecimiento y puede generar deslocalizaciones por no disponer de un entorno favorable”.

Asistentes al foro de la Fundación Schola
Asistentes al foro de la Fundación ScholaRubén Cacho/Ical

Pedro Palomo también sentenció que los ataques desde dirigentes públicos contra empresas “no favorecen al crecimiento, y pueden ser un lastre” y repitió que se debe apoyar un ambiente favorable a la inversión en España. Asimismo, constató que los fondos de la UE no están llegando a la economía real. “No está habiendo capilaridad hacia el tejido productivo; hay buenas palabras pero no está llegando”, dijo.

Además, reclamó una agilización de los trámites burocráticos que se exigen a los proyectos empresariales, como se ha propuesto desde EFCL a la Junta, que “tiene en estudio” sus planteamientos. “La pelota ahora está en su tejado”, dijo.

Un modelo de éxito

Pedro Palomo ensalzó la importancia de la empresa familiar en Castilla y León, porque integra “la mayor parte del tejido empresarial de la Comunidad”. “Es un actor muy importante en la generación de riqueza, en el día a día de Castilla y León”, constató.

En este sentido, explicó a Ical, que el “éxito” de su empresa, con seis centros, las oficinas centrales en Segovia, Pancorbo (Burgos), Cuéllar (Segovia), Abades (Valladolid) y Arévalo y San Cristóbal de la Vega (Ávila), y una facturación de 130 millones, “radica en el esfuerzo y en el trabajo, en hacer las cosas poco a poco, en el largo plazo”. “Hacer las cosas bien desde el inicio, cuando empezó mi padre hace casi 70 años; la clave está en tener las luces largas; mirar a largo plazo, con esfuerzo y trabajo, lo que nuestros mayores nos enseñaban. Ahora los jóvenes van más a corto plazo”, dijo.

Esta empresa familiar fundada en 1953 por Octaviano Palomo, está dedicada a la comercialización de cereales y de materias primas agrícolas en un mercado global, mueve 500.000 toneladas al año, genera medio centenar de empleo directos y 100 indirectos. La realidad, indicó Pedro Palomo, “ha cambiado radicalmente, hay mucha más competencia y hay que ser mejor, innovar y no quedarte atrás y ganar tamaño para poder ser más competitivo”, razonó.

Al respecto, recordó que cuando España entró en el mercado común europeo, su empresa dio el salto a la internacionalización, que “ha sido una parte importante para nuestro desarrollo en un mundo globalizado, pese a que de la pandemia salió un mundo más regionalizado en bloques”. Asimismo, remarcó su apuesta por la innovación, así como por la sostenibilidad en sus plantas, como en Pancorbo y Arévalo con el ferrocarril; así como por la digitalización, con la incorporación de la última tecnología para la trazabilidad de sus productos.