La petición del alcalde de Vigo, Abel Caballero, a Renfe de que suprima paradas de la línea del AVE que une Madrid con la ciudad gallega a su paso por Castilla y León para no alargar en demasía el trayecto ha indignado al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que ha pedido una rectificación al primer edil vigués por sus "inaceptables" palabras además de reclamar a la empresa de transporte una aclaración.

Renfe ya ha contestado y ha aclarado que se mantienen los servicios y paradas de los trenes de alta velocidad en Castilla y León que comunican Vigo y Madrid dentro de la Línea de Alta Velocidad a Galicia, según avanza Ical.

Fuentes de la operadora han explicado que la reunión se circunscribe a los encuentros que mantiene el presidente de Renfe con representantes de diferentes instituciones para escuchar sus propuestas, como indicaron ocurrió este miércoles con el encuentro que mantuvo Fernández Heredia con el regidor vigués.

"No hay novedad”, insisten desde Renfe sobre los servicios y paradas de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Galicia y, en concreto, en los que comunican Vigo con Madrid. De lunes a viernes y los domingos son cuatro trenes -un Avlo, un Alvia y dos AVE-, mientras los sábados se ofrecen dos conexiones directas -Avlo y AVE-.

En la actualidad, efectúan paradas en Castilla y León en las estaciones de Sanabria Alta Velocidad, Zamora, Medina del Campo Alta Velocidad (Valladolid) y Segovia.

Fuentes del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible aseguran también que no se había acordado con el alcalde de Vigo la supresión de paradas en Castilla y León de los trenes de alta velocidad que comunica la ciudad gallega y Madrid. Además, garantizan que ninguna población de la comunidad se quedará sin servicio ferroviario.

Este miércoles, el alcalde de Vigo informó de su reunión con el presidente de Renfe, donde le trasladó la propuesta de suprimir paradas en la Comunidad como fórmula para acortar los tiempos de viaje del AVE a Madrid, que van desde las cuatro horas y 35 minutos a las cuatro horas y ocho minutos de los trenes directos. Además, Abel Caballero aseguró que el presidente de Renfe se mostró “muy receptivo” a sus sugerencias.