Sociedad

El reto cumplido de vivir libre y la felicidad de disfrutar de las pequeñas cosas cotidianas

Benito y Nacho, dos personas con discapacidad física participantes del proyecto "Viviendas de transición hacia la vida autónoma" de Impulsa Igualdad valoran su experiencia en un proyecto que ha cambiado sus vidas

Benito y Nacho: el reto de vivir con autonomía y las pequeñas cosas cotidianas
Benito y Nacho: el reto de vivir con autonomía y las pequeñas cosas cotidianasImpulsa IgualdadLa Razón

Labores cotidianas como son las tareas del típicas del hogar como hacer la cama, cocinar e incluso ir al médico no son fáciles para las personas con alguna discapacidad física, aunque poco a poco, sin prisa pero sin pausa, van consiguiendo mejoras de la mano sobre todo de un asistente personal, dentro de un proyecto de Impulsa Igualdad en Castilla y León.

Así lo cuentan Benito Hernández y Nacho Fadrique, dos personas de esta Comunidad con discapacidad física que han concluido su experiencia de vivir de manera independiente y adentrarse en las pequeñas cosas del día a día

La iniciativa, según cuentan desde Impulsa Igualdad, antes Predif, se ha desarrollado desde 2022 y llega a su fin este mes tras haber facilitado la experiencia de vivir de manera independiente a tres personas con discapacidad y una oportunidad laboral a dos asistentes personales..

Se trata del proyecto europeo "Viviendas de transición hacia la vida autónoma", con cargo a los fondos europeos procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que busca que personas con discapacidad aprendan a vivir con autonomía.

"Participar en esta iniciativa ha sido un reto tremendo, ya que jamás había vivido solo", destaca Benito Hernández, satisfecho por cómo ha transcurrido todo y porque se ha demostrado así mismo que puede vivir solo con la ayuda de un asistente personal. "El aporte de Jannis ( el asistente) ha sido vital, me ha apoyado en cualquier cosa que necesitaba y me ha ayudado a hacer una vida normal, dentro de mis limitaciones", afirma.

Jannis Gilberto Salcedo, su asistente personal en la última etapa del proyecto, pone en lo que ha aprendido en este proyecto, en lo referente a las necesidades que tienen las personas con discapacidad, como tareas cotidianas o actividades como ir a citas médicas, rehabilitación física u otras que se realizan dentro del hogar, "pero siempre teniendo en cuenta las que los usuarios deciden", apunta.

Otro de los participantes que también finalizan su participación es Nacho Fadrique, con discapacidad física, para quien esta iniciativa le "ha dado una oportunidad que jamás pensaba que iba a tener", pero también y sobre todo una libertad "que no tenía cuando vivía en el pueblo, donde no hacía lo que puede hacer ahora siendo independiente".

"He cumplido todas las expectativas que tenía en este proyecto", señala, a la vez que destaca que quiere seguir viviendo solo y que habiendo tenido esta experiencia, "la transición sería más fácil".

Desde Impulsa Igualdad señalan que con este proyecto han pretendido facilitar e impulsar el empoderamiento de las personas con discapacidad. "Por ello hemos acompañando a los participantes con discapacidad para que adquirieran destrezas para optar a vivir de una forma totalmente independiente y refuercen su confianza en sí mismos"., apuntan.

Este proyecto piloto innovador ha implementado un nuevo modelo en el marco de los servicios sociales, ya que no se ha tratado de modelos institucionalizados o tutelados, sino una vivienda totalmente independiente, con determinados apoyos, como la asistencia persona