Fin estado de alarma

Celebraciones y descontrol nocturno sin el toque de queda

Centenares de ciudadanos salieron a las calles y plazas para celebrar el fin del estado de alarma

Gente celebrando el fin el estado de alarma en Barcelona. REUTERS/Nacho Doce
Gente celebrando el fin el estado de alarma en Barcelona. REUTERS/Nacho DoceNACHO DOCEREUTERS

Los catalanes vivieron ayer noche un momento inusual, como tantos otros en la pandemia, cuando tuvieron dos horas de toque de queda. Entre las 22 y las 00.01 del ya domingo 9 de mayo tuvieron que quedarse en casa para cumplir con la normativa vigente, tras ello, volvió la fiesta a las calles. Jolgorio, alegría y quedadas masivas a partir de la caída del estado de alarma, incluso pirotecnia en algunos puntos como en Barcelona acompañada de gritos de “libertad”. Durante los primeros minutos del domingo, la ciudad vivió otro fin de año, esta vez, en mayo. Tras casi siete meses sin libertad nocturna, ya es posible volver a disfrutar de la ciudad de forma nocturna, sin bares ni discotecas, pero con la sensación de haber recuperado en cierta manera la noche.

Las ganas de fiesta dieron paso a escenas de autentica normalidad anterior a la irrupción del Covid. Plazas como la Virreina en pleno centro del barrio de Gracia o las playas de Barcelona han tenido grandes celebraciones nocturnas. Concentraciones masivas de personas, muchas de ellas sin mascarilla ni guardar la distancia de seguridad se dedicaron a beber y festejar hasta altas hora de la madrugada. Con casi 500 personas en las UCI’s catalanas, gran cantidad de barceloneses “olvidaron” por unas horas la situación mundial y se dedicó a festejar con total normalidad la caída del estado de alarma.

Aunque no ha sido una masiva salida nocturna, se ha podido ver a gran cantidad de personas en la calle una vez superada la media noche, otros han decidido celebrarlo con más cautela, desde sus balcones y con también gritos y pirotecnia pero sin acudir a celebraciones masivas. Aún así, el ambiente en las calles barcelonesas ha sido más propio de un fin de año o verbena de San Juan que de una noche con pandemia.

El teniente de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha explicado que la Guardia Urbana, en coordinación con los Mossos d’Esquadra, ha desalojado cerca de 6.500 personas de 31 espacios distintos de la ciudad la madrugada de este domingo, la primera sin toque de queda en Catalunya tras el fin del estado de alarma. Batlle ha alertado de que “las imágenes pueden ser preocupantes por ser actos de absoluta irresponsabilidad” protagonizados sobretodo por personas jóvenes, un colectivo que recuerda aún no ha recibido la vacuna contra el Covid-19 y no goza de inmunidad ante el virus.

Desde hoy, los catalanes no solamente pueden salir a la calle por la noche, también pueden ir a bares y restaurantes de forma ininterrumpida desde las 7.30 de la mañana hasta las 23.00 horas aunque las reuniones sociales siguen limitadas a seis personas. Se espera que la medida en la restauración evite las concentraciones vistas esta noche y permita a la gente disfrutar con más calma de la nueva situación.

Catalunya ha registrado hasta este domingo 662.382 casos confirmados acumulados de coronavirus desde el inicio de la pandemia -612.537 con una prueba PCR o test de antígenos-, 1.462 más que en el recuento del sábado, ha informado la Conselleria de Salud de la Generalitat a través de su página web.