Boicot del Govern Aragonès al 12-O: celebrará su reunión habitual pese a ser festivo por la Hispanidad

Nueva afrenta pública del independentismo: el Govern de Esquerra y Junts encabezado por Pere Aragonès ha anunciado que el próximo martes no hará fiesta con motivo del 12 de octubre, Día de la Hispanidad, y mantendrá su reunión semanal del Consell Executiu. El gabinete independentista tiene por costumbre celebrar su encuentro los martes a primera hora de la mañana con todos los consejeros y luego informar de los acuerdos en rueda de prensa desde el Palau de la Generalitat y a partir de las 12:30 horas.

Una rutina que mantendrá el martes que viene pese a ser festivo por la Hispanidad y último día de un largo puente contando con el fin de semana. Así lo ha avanzado la propia portavoz del Ejecutivo catalán, Patrícia Plaja.

Cabe recordar que en los últimos años el independentismo ha criticado esta festividad y ha llamado a mantener las actividades políticas e institucionales habituales el 12 de octubre. De hecho, en 2019 impulsó un “mecanismo legal” para que los funcionarios de la Generalitat que lo deseen puedan trabajar dos festivos estatales: el 6 de diciembre, Día de la Constitución, y el 12 de octubre, la Fiesta Nacional de España. Una opción voluntaria que el Ejecutivo llevará a cabo el próximo martes desdeñando así el día de la Hispanidad.

Reclama Cercanías

Por otro lado, el president Pere Aragonès ha usado el caos por la huelga de Renfe y la situación límite en Cataluña para exigir a Pedro Sánchez el traspaso de competencias de Cercanías. Una reclamación que ha plasmado por carta a la Moncloa: “Quiero pedir una mayor implicación del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, competente en este ámbito. Es imprescindible poder tener toda la información detallada por su parte, tanto de las propuestas para solucionar la situación concreta de estos días como también para solucionar los problemas estructurales”, remarca el republicano.

Según el president, “la falta de inversiones que sufre Cataluña en material de movilidad es incuestionable y desde hace décadas requiere de una solución efectiva, eficiente y real”. Para resolverlo, advierte, “son urgentes propuestas claras, concreciones en el marco de la Comisión Bilateral Estado-Generalitat”

En concreto, el Govern reclama el traspaso completo de la gestión de este servicio, una petición recurrente del nacionalismo que ahora Aragonès vuelve a poner sobre la mesa aprovechando la huelga de Renfe de los últimos días. Y mientras no se haga efectivo, exige al Ejecutivo de Pedro Sánchez que ponga sobre la mesa “soluciones, voluntad y disposición”. De hecho, el Ejecutivo va un paso más allá y achaca las escenas de caos al Gobierno, a quien pide poner fin a su “desidia y dejadez” con el servicio de Renfe en Cataluña.