Economía
El freno en las llegadas de turistas reaviva el debate sobre la evolución del sector
En los siete primeros meses del año llegaron a Cataluña un total de 11,6 millones de visitantes extranjeros, un 1,14 % más que en el mismo período de 2024
Cataluña continúa batiendo récord de llegada de turistas internacionales, pero la pérdida de impulso durante el verano vuelve a situar en primer plano el debate sobre la evolución del sector, uno de los motores de la economía española, y su gestión.
En los siete primeros meses del año llegaron a Cataluña un total de 11,6 millones de visitantes extranjeros, un 1,14 % más que en el mismo período de 2024, aunque el número retrocedió en julio un 1,2 %, según datos del INE.
El gasto medio por visitante creció en julio un 5,2 % gracias al impulso de los mercados emisores de larga distancia frente a los europeos tradicionales, que se comportaron de manera más contenida.
A falta de conocer los datos oficiales de agosto, algunos sectores como el hotelero y los apartamentos turísticos han avanzado ya que se ha mantenido la moderación en las llegadas. En este contexto, los hoteleros, sobre todo en la capital catalana, ponen el foco en atraer a visitantes que gasten más y en mejorar la oferta de calidad.
En cuanto a los apartamentos turísticos, Barcelona ha cerrado el verano (junio, julio y agosto) con una ocupación media del 88 %, algo por debajo de la del mismo período de 2024 (88,4 %), aunque agosto fue especialmente flojo al caer un 2,5 %, según la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona, Apartur.
La patronal de los pisos turísticos atribuye el retroceso a un conjunto de factores económicos, sociales y climáticos, entre los que destaca el "relato mediático negativo" que se ha hecho, según asegura, respecto a la capital catalana. En concreto, lamenta el impacto de "la difusión internacional de noticias sobre masificación, turismofobia e inseguridad". Además, los precios cada vez más altos del transporte y el alojamiento reducen el gasto de los viajeros.
La directora general de Apartur, Marian Muro, insta a reflexionar sobre el descenso de visitantes y gasto en plena temporada alta. "Barcelona sigue siendo un destino de primer nivel y con capacidad de atracción internacional, pero necesita reforzar su imagen", sostiene.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Turismo de la patronal Foment del Treball, Miquel Gotanegra, insta a reforzar la base que ha hecho posible las buenas cifras de llegada de turistas internacionales de los últimos años con una estrategia basada en la desestacionalización del turismo.
"El sector turístico parte de una base muy sólida. El reto es continuar trabajando para reforzar esta base. Los crecimientos no pueden ser indefinidos y la apuesta es clara: priorizar la calidad por encima de la calidad", afirma.
La clave en este momento pasa, a su juicio, por continuar avanzando en la "desestacionalización", tras apuntar que las cifras de ocupación de cara al otoño son "positivas".
Gotanegra emplaza también a evaluar las temporadas turísticas una vez finalizado el año natural, y no al acabar el verano, y teniendo en cuenta parámetros como la estancia media, el gasto efectuado y los nuevos mercados emisores, y no sólo el número de visitantes.
El presidente de Pimec Turisme, Carlos Rabaneda, pone en valor que, pese a la desaceleración, Cataluña continúa siendo el principal destino turístico de España, "con máximos históricos y un peso del 21 % en el conjunto del Estado". El actual contexto revela, a su juicio, "un cambio estructural en el modelo turístico", que requiere pasar de priorizar el volumen a apostar por la calidad y el valor añadido.
"El gran reto es que este incremento del gasto se traduzca en un mejor reparto territorial, en más oportunidades para el conjunto del tejido empresarial y en una reducción real de la estacionalidad que aún condiciona el sector", asevera.