Guardia Civil

Interceptado en Alicante un cargamento de móviles falsos

Los aparatos hubieran tenido un valor de más de 90.000 euros en el mercado negro

En la imagen, varios de los móviles falsos incautados
En la imagen, varios de los móviles falsos incautadosLa Razón

La Guardia Civil, en colaboración con la Agencia Tributaria, ha detenido a un hombre por ser el presunto autor de un delito contra la propiedad industrial al comercializar, supuestamente, terminales móviles falsos que imitaban modelos existentes de marcas reales.

A finales del pasado año 2019, una carga de tres bultos que se encontraba en el puerto alicantino levantó las sospechas tanto de la Guardia Civil como de la Agencia Tributaria.

Dicha carga había llegado al Aeropuerto de Alicante, vía aérea, desde China y había sido trasladada al Puerto de Alicante para ser finalmente embarcada hasta Argelia.

La Guardia Civil decidió examinar el contenido de las tres cajas, en colaboración con el Servicio de Vigilancia Aduanera de Alicante, y halló en su interior cientos de teléfonos móviles, de distintas marcas, que reunían las características habituales de una imitación (no llevaban embalaje original, carecían del correspondiente manual de uso, así como también de los accesorios, de cualquier tipo de garantía y del correcto etiquetado).

Con toda esta información, los agentes remitieron un informe fotográfico de los terminales móviles interceptados, a cada una de las marcas supuestamente afectadas, con el objeto de verificar si dichos teléfonos se trataban de imitaciones o falsificaciones.

Posteriormente, las empresas afectadas confirmaron la falsedad de 525 móviles incautados, valorando el perjuicio económico que les habría supuesto su venta en el mercado negro en más de 91.500 euros.

Por todo lo anterior, la Guardia Civil ha detenido a un hombre de 43 años, de nacionalidad argelina, por ser el presunto autor de un delito contra la propiedad industrial.

Más de un millón de euros en productos falsificados

Cabe destacar que, este tipo de actuaciones, llevadas a cabo por la Sección Fiscal de la Guardia Civil del Puerto de Alicante, de acuerdo con las directrices de la Agencia Tributaria a través del administrador de la Aduana, están destinadas a perseguir, entre otros delitos, los cometidos contra la propiedad industrial, como es el caso de las falsificaciones de teléfonos móviles, prendas de ropa, calzado, joyas, bisutería, es decir, todo objeto (normalmente de grandes marcas) susceptible de ser imitado y falsificado.

Solamente durante el pasado año 2019, se han incautado un total de 13.584 efectos falsificados, lo que habría supuesto a las marcas perjudicadas en cuestión, un impacto económico valorado en más de 1.138.400 euros.