Puig garantiza que la Generalitat codecidirá en las siguientes fases de la desescalada

Las decisiones en la desescalada se tomarán a partir de ahora forma mancomunada entre el Gobierno central y la Generalitat valenciana. “Hemos pasado de pantalla”, ha asegurado el jefe del Consell, Ximo Puig, tras la conferencia de presidentes autonómicos con Pedro Sánchez.

Adaptaciones de las franjas horarias -más allá de la anunciada para los municipios de menos de 10.000 habitantes-, cambios en la movilidad para hacer deporte, uso de las playas y la posibilidad de desplazarse a la segunda residencia esté en la provincia que esté, son algunas de las singularidades que el presidente Puig ha reclamado y exigido ante Sánchez de cara a la fase 2 de la desescalada.

De hecho, la cobernanaza ha sido uno de los diez retos que Puig ha planteado hoy a Sánchez durante el encuentro semanal. “Necesitamos profundizar en la codecisión”, ha indicado el jefe del Consell. En este sentido, ha señalado que desde la Generalitat se han mostrado de acuerdo en mantener el estado de alarma pero, ha añadido, “las grandes ideas se tienen que abordar desde la perspectiva local”.

Por ello, Puig ha planteado contar con capacidad de maniobra en aspectos como el turismo, el deporte, el senderismo, la vida cotidiana o el acceso a las playas. “Nosotros lo podemos resolver mejor”, ha indicado.

Precisamente el acceso a las playas es otro de los diez puntos trasladado al presidente Sánchez. “Las playas no son un peligro, están al aire libre y se pueden mantener las distancias. Todos tenemos derecho al ocio".

En cuanto al turismo, Puig ha exigido una “solución europea” para un sector de tanta relevancia para la economía de la Comunitat.

Reanudar la actividad judicial es otra de las necesidades que, según Puig, hay que solucionar de manera inmediata. “La justicia es un derecho esencial. Tenemos más de 20.000 juicios suspendidos en la Comunitat Valenciana y estamos incorporando ya las medidas necesarias para poder volver”.

Por otra parte, el presidente ha insistido en la necesidad de comunicar bien a los jóvenes y “por los canales que ellos utilizan más" las normas de cada fase para que no se conviertan en transmisores.