El “tardeo” preocupa al Gobierno valenciano

Decretar el toque de queda tiene como objetivo evitar reuniones particulares, así como el cierre de la hostelería en horario nocturno pretende restringir el tiempo de ocio, donde según remarca diariamente la Conselleria de Sanidad, se producen más contagios. Sin embargo, a pesar de la existencia de esta restricciones, los casos de covid en la Comunitat Valenciana no bajan.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, descartó aplicar endurecer las medidas existentes. Argumentó que son suficientes y que la Comunitat Valenciana, es una de las regiones donde las restricciones son más estrictas. De momento, «son suficientes», pero no pudo evitar expresar su preocupación por la fotografía que muestran las calles en momentos como el «tardeo».

«El problema no es el horario», dijo Puig pidiendo «la máxima responsabilidad de todos». Se refirió a los responsables de los locales, pero también a los ciudadanos a los que pidió cumplir con las medidas de seguridad sobradamente conocidas a estas alturas de la pandemia. «Un día no es un día, un día puede ser el último día».

Admitió además que la vacuna será la solución a medio plazo, pero «vamos a pasar meses, los primeros del año, muy complicados».

Sobre los motivos por los que la Comunitat Valenciana es la tercera región en incidencia de covid, defendió la gestión realizada hasta el momento, aludiendo a la situación que atraviesan países como Alemania o Austria. Allí se ha descontrolado el virus después de lograr contener la primera ola. «No hay recetario para soluciones inmediatas y cualquier irresponsabilidad acaba afectando a mucha gente».

Por lo que respecta a la presión hospitalaria, recordó que en el punto alto de la pandemia se llegó a 2.500 hospitalizaciones. En el último parte, Sanidad confirmó 1.725, una cifra preocupante. «No se pueden «bajar los brazos» en los próximos días.

Falta información

Desde la oposición, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, reclamó que se establezca un plan diario con los centros de salud y colaboración público-privada.

Además, criticó que el jefe del Consell no informe a la oposición de ese plan de vacunación ni de «nada» de la pandemia. «Creo que debería establecerse un plan de vacunación diario, con los centros de salud completos y también con la colaboración público-privada, y que primero se vacune a los más vulnerables, y después, el resto», según informa Efe.

Por su parte, el grupo Ciudadanos presentó una Proposición No de Ley (PNL) para reclamar la colaboración de las farmacias en la gestión de la pandemia ocasionada por la covid y ha propuesto que puedan hacer test de detección del virus.

El portavoz de Sanidad de Ciudadanos, Fernando Llopis, lamentó que no se estén aprovechando lo suficiente todos los recursos disponibles para luchar contra el coronavirus.

Criticó también que no se haya establecido un canal de comunicación estable y coordinado entre el Consell y las farmacias, una «colaboración fundamental en estos tiempos de emergencia sanitaria».

También reclama un canal de comunicación estable con las farmacias y un programa de apoyo en la distribución a domicilio de los medicamentos para la población de riesgo y vulnerable.