Política

Mazón defiende a Catalá frente a los ataques e insultos en redes sociales

El presidente enumera las ofensas recibidas por la alcaldesa y defiende al alcalde de Elche ante los carteles homófobos

La alcaldesa de Valencia recibió un cariñoso aplauso de sus compañeros del PP
La alcaldesa de Valencia recibió un cariñoso aplauso de sus compañeros del PPAgencia EFE

Intensa sesión la de ayer en Les Corts valencianes, una jornada en la que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, realizó una encendida defensa de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, que fue insultada de forma reiterada en Les Corts Valencianes por no colgar la bandera LGTBi de la fachada del consistorio. Sin embargo, en estos ataques, algunos furibundos, se obvia que el Ayuntamiento de Valencia se ilumina por las noches con los colores de la bandera del arco iris.

El síndico del PSPV, José Muñoz pidió a Mazón que llame al orden a la alcaldesa de Valencia, «que ha igualado la homosexualidad con una enfermedad». Con estas palabras se refería a las declaraciones de Catalá del pasado miércoles en las que señaló que el Ayuntamiento de Valencia «no pone banderas en el balcón, pero no solo por el Día del Orgullo, tampoco las pone por el día de la ELA, ni el día del alzhéimer, ni el día del cáncer».

En este punto, el presidente Mazón hizo una encendida defensa de Catalá, «mujer, feminista y madre que concilia» y reprochó al PSPV que los ataques a la alcaldesa han generado una corriente de odio en las redes sociales y leyó casi una docena de tuits en los que la llaman «hija de la gran puta» y otros calificativos.

La alcaldesa de Valencia recibió un cariñoso aplauso de los diputados de PP y de Vox. Mazón explicó que Catalá «no ha puesto una pancarta de plástico a favor del Día del Orgullo», y mostró fotografías de la fachada del Ayuntamiento de Valencia iluminado con los colores de la bandera arco iris.

El presidente salió también en defensa del alcalde de Elche, Pablo Ruz, que ha sufrido insultos homófobos mediante la aparición de carteles en su pueblo en los que se cuestiona su orientación sexual.

Por otra parte, Muñoz exigió a Mazón que cese a su consellera de Justicia y que se retracte de identificar inmigración ilegal con delincuencia: «¿Estas personas que nos ayudan todos los días son ilegales? Las personas no son ilegales aunque su situación sea irregular».

En este punto, la consellera se defendió a sí misma y dijo que «el modelo multicultural de fronteras abiertas ha fracasado en Europa» y defendió el modelo intercultural que integra al inmigrante conociendo los valores y la cultura del país que los acoge.

La vicepresidenta y consellera de Bienestar Social, Susana Camarero, también fue interpelada por las declaraciones de un director general de su Conselleria en las que anunciaba al colectivo Lambda la supresión de las ayudas económicas del Consell. Camarero dijo que la Generalitat ha celebrado «un orgullo sin sectarismo, un orgullo para todos y de todos. Ustedes mañana celebrarán una celebración del insulto. Se ha demostrado que la diversidad es de la sociedad, no es de izquierdas ni de derechas».

Compromís lo intenta

Y mientras esto ocurría en Les Corts, en la fachada del Ayuntamiento de Valencia el grupo municipal de Compromís intentaba desplegar la bandera LGTBi «siquiera unos minutos», algo que impidió la Policía Local. El Ayuntamiento de Valencia decidió hace meses instalar unas pantallas en la plaza para proyectar este tipo de enseñas. Por otra parte, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, afirmó ayer que su cartera estudia emprender «acciones penales» contra la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, por sus palabras sobre la bandera LGTBI.

Defensa de la Albufera

Por otra parte, el presidente de la Generalitat anunció durante la sesión de ayer que su gobierno interpondrá un recurso contencioso administrativo para tratar de asegurar de este modo los caudales ecológicos de L’Albufera después del desencuentro con la Confederación Hidrográfica del Júcar a cuenta de los dieciocho hectómetros cúbicos que la CHJ asegura que ya ha vertido al lago y que la Generalitat niega.