Las sillas de madera regresan a la Explanada de Alicante y los puestos de artesanía se van

Son un icono de la ciudad de Alicante, casi tanto como el paseo en el que se ubican, la Explanada, que discurre en paralelo a la fachada marítima. Son las sillas del paseo, ahora en tono madera de haya y añtano de colores e incluso con reposabrazos, y forman parte de la memoria colectiva de generaciones y generaciones de alicantinos que han convivido con ellas. Ahora, han vuelto a este espacio, único en la ciudad, del que se retiraron de manera provisional por las obras de acondicionamiento y peatonalización del conocido como fondo de saco, ubicado en la intersección de la Explanada con la Rambla de Méndez Núñez, para ser exactos.

Porque no hay que olvidar que es una costumbre muy arraigada entre los alicantinos hacer un alto en el camino y sentarse en una de las sillas, ya sea si van camino de la playa urbana del Postiguet o simplemente para disfrutar de las vistas al puerto de la ciudad, la brisa del mar y el sol o la sombra de las palmeras que flanquean el paseo. Sirven también para hacer tertulia con los amigos, leer el periódico o para que las familias descansaran en su paseo en el lugar por excelencia de reunión los domingos. Según las imágenes del archivo municipal de Alicante, las sillas ya se usaban en la Explanada en en el año 1900.

De momento, el Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Parques y Jardines, ha colocado 48 sillas, si bien el stock es de cien y se reponen cuando desaparecen por hurtos; de ahí que en la trasera de las sillas aparezca escrito: “Propiedad del Ayuntamiento. Uso exclusivo de la Explanada”. Tal y como explica el concejal del área, y también portavoz del gobierno local, Manuel Villar, “una vez finalizadas las obras de la tercera fase de la Explanada se ha repuesto el servicio de sillas en este entorno manteniendo esta tradición tan alicantina”. Villar añade que, además, la empresa que gestiona el mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad, STV, proveerá al paseo de otros 200 asientos más. Las sillas se recogen por la noche y se vuelven a colocar por la mañana en la parte central del paseo.

Del color a la palidez

De paseo de la Explanada llama la atención el suelo, de teselas de mármol forman ondas de color blanco, azul y rojo, imitando así las olas del mar, y la disposición de las sillas a primera hora de la mañana, en torno a los alcorques de los que salen los troncos de las palmeras. De ahí que sean una seña de identidad de Alicante, y hace años sus colores eran los mismos de las teselas, mientras que hoy en día son monocolores y de madera de haya.

Pero el regreso de las sillas a la Explanada no es el único cambio para una zona que recorren al año miles de turistas. Los puestos de artesanía, popularmente conocidos como hippies, dejarán su ubicación actual, en el último tramo del paseo, justo antes del Parque de Canalejas el 31 de octubre de 2024. Y, al igual que las sillas, su vínculo con la Explanada forma parte del imaginario colectivo de los alicantinos.

La razón que esgrime el gobierno local es que hay que recuperar este espacio emblemático para el disfrute y esparcimiento de alicantinos y visitantes para así lograr un paseo más diáfano, abierto al uso general de la ciudadanía y conectado visualmente con la fachada marítima. Así las cosas, está claro que los 31 puestos de artesanía desaparecerán de su actual ubicación, sin que haya una nueva ubicación para los mismos, aunque suena como opción el Paseo de Gadea.

Hay que recordar que en marzo de 2023 el pleno del Ayuntamiento decidió ampliar hasta el 31 de octubre de 2024 el periodo transitorio para la suspensión de los puestos de la Explanada; pero ahora la Comisión de Presidencia ha decidido que ese día, el 31 de octubre, desaparezcan de su actual emplazamiento.