La “monstruosa” contraofensiva de los estudios para recuperar el público en las salas

Después de descartar las salas como foco de contagio e inmersos en un proceso de vacunación cada vez más eficaz pese a los retrasos, la última de las barreras que marcaba la apatía de nuestra taquilla, en forma de escasez de grandes superproducciones, ha caído. Y lo hace además en pugilístico símil, con dos gigantes de la industria (Sony y Warner) partiéndose la cara en el primer asalto de una lucha a varios de aquí al verano y a la espera de que las demás «majors» se animen a recoger su toalla de la lona. El estreno de «Godzilla vs. Kong», además de la pelea entre dos de los titanes más míticos que ha parido el cine palomitero, significa un cambio de paradigma respecto a la pandemia: las salas vuelven a tener prioridad y solo los títulos considerados «menores» por su propia matriz verán la luz en las plataformas de «streaming».

De hecho, el movimiento empresarial de rectificación es aún más profundo y Warner ya ha firmado una ventana de exhibición explícita de 45 días para con los distribuidores en EE UU. Esto significa que, en 2022, todos sus títulos pasarán primero por las salas antes de poder verse en HBOMax. La película de Adam Wingard, espectacular y digna de la experiencia cinematográfica completa, reconcilia a los grandes operadores con las cadenas de distribución más humildes, convirtiendo los «uppercuts» del mono y el lagarto en nuevas formas, ciertamente más éticas, de repartir la tarta. En la misma dirección ha apuntado Disney, que, sin monstruos para combatir al virus pero con superhéroes dispuestos a recaudar lo que haga falta, ha oficializado la llegada de «Viuda Negra» y «Cruella» a los cines un par de meses antes que a su plataforma digital, que ya da beneficios.

En ese esperanzador panorama se estrena también «Monster Hunter», la película basada en el videojuego homónimo que protagoniza Milla Jovovich a las órdenes de Paul W. S. Anderson, repitiendo el tándem que tan irregulares resultados ha ofrecido en la saga «Resident Evil». Después de retrasarla en cuatro ocasiones, Sony ha decidido volver a las salas con un título que ha funcionado muy bien en el mercado asiático y que, además, será el primero de una tanda de «rentrée» al cuadrilátero con «Ruega por nosotros» (terror) y «Peter Rabbit 2: a la fuga» (comedia) en el horizonte. Por si fuera poco, cualquier viso de intolerancia al taquillazo y preferencia por lo sutil se supera gracias al estreno de «Nomadland». Las buenas noticias no acaban ahí, ya que según ha explicado la Federación de Distribuidores (FEDICINE) a LA RAZÓN, alrededor del 80% de las salas de nuestro país estarán abiertas (y acondicionadas en cuanto a lo sanitario se refiere) desde mañana y hasta el fin de la Semana Santa, marcando un nuevo máximo tras el fin del confinamiento extremo.

Además, Yelmo Cines ha decidido volver a abrir sus salas a tiempo completo. Como ocurriera tras la II Guerra Mundial, cuando nuestros miedos se agigantaron y empezaron a escupir fuego atómico, la tragedia ha propiciado una velada definitiva de los monstruos para que vuelva a sonar la campana del séptimo arte.