Hollywood pecador
Hubo una época en que a Hollywood se le conocía como la Meca del pecado. Y aún lo sigue siendo. Grandes actores, directores y estrellas abusan de sus hijos, biológicos o no, como Woody Allen, o consumen drogas hasta morir enganchados a una jeringuilla, como el actor Philip Seymour Hoffman, al que acaban de encontrar muerto supuestamente por sobredosis en el cuarto de baño de su casa neoyorquina. También en el suelo del baño encontraron a Elvis Presley, con tantas drogas en el estómago que parecía un «drugstore».
En la era dorada de cine mudo, Hollywood era sinónimo de sexo, drogas y estrellas, y también orgías salvajes. Como las protagonizadas por Roscoe «Fatty» Arbuckle, que para celebrar su millonario contrato montó un «party» con una docena de flappers contratadas por 1.000 dólares por cabeza. En una discreta posada, las chicas se desnudaron y comenzó la «partouze» en la que pillaron a los magnates del cine Adolf Zucor, Jesse Lasky y Joseph Schenck junto el gordito Fatty en pleno destape. El escándalo fue de tal magnitud que tuvieron que sobornar al fiscal con cien mil dólares para que se echara tierra al asunto.
Abusos, incestos y drogas
No tuvo tanta suerte Fatty cuando celebró su siguiente contrato con una fiesta en San Francisco el 5 de septiembre de 1921. Más de cincuenta invitados borrachos convirtieron el hotel San Francis en una «party» salvaje. Allí, borracho y drogado, Fatty violó salvajemente a la actriz Virginia Rappe hasta causarle la muerte. Fue condenado por asesinato al destrozar a Virginia con una botella de Coca-Cola.
Charles Chaplin también era conocido por su afición a las mujeres, especialmente menores de edad. La primera nínfula que lo metió en un lío fue Mildred Harris, de dieciséis años, con la que se casó embarazada. La siguiente fue Lolita, de doce, a quien lanzó a la fama en papeles infantiles con el nombre de Lita Grey. Al dejarla embarazada, la madre de Lita le obligó a casarse, amenazándolo con acusarlo de violación de una menor. El divorcio le costó un millón de dólares.
Las niñas también fueron la perdición de Roman Polanski. Su relación con la menor de trece años Samantha Geimer comenzó al borde de una piscina. Le hizo fotos en topless para «Vogue» y en la mansión de Jack Nicholson mantuvieron relaciones sexuales, colocados y borrachos. Polanski admitió ante el juez haberla violado y llegaron a un acuerdo económico, pero en el último momento éste dio marcha atrás y Polanski su fugó de América. Tras numerosas vicisitudes, el abogado de Geimer llegó a un acuerdo de medio millón de dólares en 1993.
Asunto más peliagudo es el de Natasha Kinski, la hija del histriónico actor alemán Klaus Kinski. La descubrió Wim Wenders en una discoteca y en su primera película la desnudó, siendo una quinceañera. Roman Polanski quedó prendado de su belleza infantil y mantuvieron una tórrida relación sexual siendo menor. En sus memorias, Natasha acusó a su padre de someterla a abusos sexuales y maltratos físicos y verbales en su infancia.
Menos conocida hoy, pero muy popular en los años 60 por ser la musa de Andy Warhol, es Eddie Sedwick. Su padre daba clases en la Escuela de Económicas de Harvard y sus hijos se educaron alejados de la institución pública en un rancho de 6.000 acres con escuela propia. Eddie fue internada en varios centros de salud antes de volar a Nueva York, en 1963, para huir de su padre, que la violaba desde niña. Murió de una sobredosis de heroína tras una corta pero fulgurante carrera como modelo y musa del cine underground. El incesto parece estar a la orden del día entre estrellas de Hollywood. Angelina Jolie acusó a su padre, Jon Voight, de abusos psicológicos y sexuales y éste, a su vez, la acusó de practicar el incesto con su hermano James cuando eran niños. La Toya Jackson reveló que su padre abusaba de Michael y demás hermanos Jackson, y que les pegaba sin motivo. Una recriminación bastante corriente entre los niños prodigio. Tatum O'Neal, hija de Ryan O'Neal, reveló en su autobiografía, «A Paper Life», que su madre era alcohólica y drogadicta y que abusaron de ella tanto el camello de su padre como un amigo de su madre. Insinuando que también lo hiciera su padre. Horrores del mundo de Hollywood.