Atom Rhumba, para no todos los públicos

Rober! hace una pausa en su trabajo para atender esta entrevista. «De los 400 que somos aquí, solo dos saben que me dedico a la música. Pero es que a la mayoría le tiene sin cuidado no la mía, sino la música en general. Oyen la radio, y si acaso...», comenta sin revelar cuál el la ocupación que le da sustento y que compagina con su vida en Atom Rhumba, una de las bandas más auténticas y estimulantes del panorama nacional. Rober! es el único miembro orginal del grupo y reconoce que esa vida de paisano le da otra perspectiva. «Es que si te dedicas siempre a estar entre músicos, a hablar con prensa musical y a escuchar música, te piensas que es más importante de lo que es en realidad. En mi empresa, la gente no sabía quién era Lou Reed cuando se murió y eso para mí es un anatema porque en la vida hay tres cosas: comer, follar y la música. A ver, que son gente maja todos, ¿eh? Pero de otra galaxia. Aunque claro, yo de fútbol no sé nada y por aquí todo el mundo sabe hasta cuándo se hace las pajas el entrenador del Athletic. Perdona, que me está saliendo todo muy políticamente incorrecto», dice el bilbaíno.

El grupo acaba de publicar «Cosmic Lexicon», un trabajo diverso, crudo y sorprendente como los anteriores, que esta vez edita el Segell del Primavera, la discográfica del poderoso festival barcelonés. Y a pesar de los cambios de formación constantes, el alma y el sonido de Atom Rhumba siguen reconocibles. «Y no es que esté yo todo el día con la batuta. Lo que pasa es que el grupo está muy visto y la gente que entra ya sabe cómo debe sonar la banda. De todas formas, cualquiera no puede tocar en Atom Rhumba», explica. En el álbum hay una gran diversidad de estilos, del blues al garage. «Es que yo no sé cómo surgen las canciones pero a mí me salen todas muy diferentes. Aunque no encajen en un perfil determinado siguen siendo mías. Es como si tienes un hijo rubio y dices: ''Uy no, esto no es mío''. Pues no puedes hacer eso. Aunque es cierto que a veces pienso: ''¿Esto lo he hecho yo?''. Pero bueno, que también veo a una chica por la calle y me digo: ''¿Esa era novia mía? En qué estaría pensando''. Bueno, eso no lo pongas. Dí que a veces veo a alguien y pienso: ''Menudo subnormal ¿cómo podía ser mi colega antes ese tío? Oye, me está saliendo todo incorrecto, ¿eh? Perdona». Rober! solo se plantea las explicaciones de los temas a posteriori. «Cuando me hacéis preguntas, me veo forzado a pensar cosas por primera vez. Y también para no decir ''es que me salió así'' o ''pues no lo sé'', que sería la respuesta el 90 por ciento de las veces... Como si terminas un cuadro y te piden que enseñes el boceto. Pues es que no hay boceto. Salió así».

Quizá el fichaje por el Segell le permita dejar el trabajo. «Es que no lo veo ni posible. Nos van a ayudar, pero yo le invito a cualquiera a que haga números para que se den cuenta de que es imposible. Estoy cómodo, bueno cómodo no, porque mi vida, con dos hijos, es una puta locura, pero me he hecho mi hueco así. Con las ventas de los discos es imposible y con los conciertos tendríamos que tocar a un ritmo de todos los fines de semana y entradas a un precio... pero a mi nadie me obliga a tocar, que las cosas están como están y podría estar poniendo ladrillos. Yo entiendo que a la gente no le guste nuestra música». No saben lo que se pierden.