Enfermería

Víctor Hernández supera la cornada de Las Ventas y deja el hospital

El joven torero madrileño encara ahora una recuperación compleja tras ser alcanzado por el quinto astado de una tarde que lo puso al límite

Vista de la cogida del diestro Víctor Hernández, durante la corrida de la Feria de Otoño celebrada este sábado en la plaza de toros de Las Ventas, en Madrid.
Vista de la cogida del diestro Víctor Hernández, durante la corrida de la Feria de Otoño celebrada este sábado en la plaza de toros de Las Ventas, en Madrid. Borja Sánchez-trilloAgencia EFE

Víctor Hernández ya ha salido del hospital. El joven matador abandonó la tarde del martes la Clínica Fraternidad Muprespa-Habana de Madrid, dos días después de sufrir una cornada brutal en Las Ventas que lo dejó fuera de combate en una tarde que apuntaba a lo más alto. Fue el quinto toro de la tarde, en una jornada marcada por el buey el compromiso, el que le atrapó por el gemelo izquierdo.

La herida no fue menor. Según el parte médico, la cornada provocó una trayectoria de 15 centímetros en la cara interna de la pierna izquierda, con destrozos importantes en la musculatura del gemelo. Una lesión seria, quirúrgicamente intervenida en la enfermería de la plaza bajo anestesia general, antes de su traslado urgente al hospital.

"Herida por asta de toro con trayectoria hacia fuera de 15 cm", detallaron los doctores García Padrós y García Leirado, que firmaron el parte oficial. El diagnóstico fue grave, y el torero no pudo volver al ruedo. Pero lo que parecía un susto mayor ha dado paso, al menos, a un primer alivio: Víctor está en casa, fuera de peligro.

Más allá del parte clínico, queda la huella emocional. No es solo la pierna herida: es el choque con la realidad de quien pisa Las Ventas con hambre de todo y se encuentra cara a cara con el filo del toro. Para Hernández, como para tantos, esto no es solo profesión: es vocación, y también un pacto tácito con el riesgo.