Esta Liga se gana durmiendo

El nombre del campeón, una plaza para la Champions o incluso pasar o no apuros para evitar el descenso puede depender de un pequeño detalle. Y no sólo dentro del campo, también fuera, en el poco tiempo que hay entre partido y partido. Si habitualmente es imprescindible saber descansar, mucho más en esta Liga exprés de once partidos en unas cuantas semanas y con no más de cuatro días entre choque y choque. Las fuerzas están justas y hay que saber recuperar en esos pocos espacios en los que el balón se detiene. Hay que comer bien, intentar desconectar mentalmente y dormir, sí, como suena, porque de las horas y la calidad de sueño de tus centrocampistas puede depender gran parte de tu futuro en la competición. Y por ese pequeño detalle se puede escapar algún punto clave.

«El sueño es fundamental para el rendimiento. Es uno de los motores de un equipo. Sin ir más lejos, estos últimos días se ha hablado mucho de la cama en la que duerme Llorente. El descanso es fundamental, porque ayuda a la recuperación psicológica y muscular», explica Ignacio Martín, preparador físico experto en el uso del GPS en el fútbol. «Un jugador importante que mueve el equipo, si duerme las horas que debe y descansa y recupera como toca, va a hacer que el juego del colectivo sea fluido», continúa Ignacio, que detalla las virtudes de un buen descanso. «Las recuperaciones biológicas y fisiológicas se producen antes de lo previsto y el fútbol de los tuyos será mucho más veloz», detalla. «Si, por el contrario, tu futbolista no descansa ni la mitad que antes, tu juego se ralentiza», confirma.

Lo que no está muy claro es cuánto debe dormir un deportista de alto nivel para rendir a tope, porque no es una cuestión únicamente cronológica. «Depende de la calidad del sueño. Si una persona descansa ocho horas, pero la calidad de sueño es mala, no es adecuado. Pero si un jugador duerme seis horas con una buena calidad de sueño, pues es genial. Entre seis y siete horas con calidad buena es un descanso muy óptimo», concluye Ignacio.

En esta reanudación de la Liga se ha visto a equipos que estaban como un tiro y ahora no son capaces de ganarle a nadie y también se han dado casos opuestos: plantillas que volaban y ahora esperan con ansiedad esas pausas de hidratación para oxigenarse. Muchos creen que esto se debe sólo a factores físicos y futbolísticos, pero Ignacio apunta al descanso como causa a tener también muy en cuenta. Pasar de tener la Champions a tiro a no saber dónde vas a estar, pues es complicado. «Hay un componente físico y psicológico en estas rachas negativas y muchas veces también hay que sumar que el descanso igual no es el correcto».

«Si ves en las aplicaciones que tienes a tu disposición que cuatro o cinco jugadores no están durmiendo las horas que toca ni recuperan como toca, tienes un problema». En este caso entran en juego, nunca mejor dicho, factores externos, incluso personales del futbolista, que le llevan a no poder alcanzar un sueño reparador y esto es algo que se ve reflejado en el rendimiento sobre el césped.

Cada pequeño detalle cuenta y la Liga se la llevará el que mejor juegue, y por tanto, el que sepa descansar con más calidad. No es de extrañar las quejas que se han dado estas últimas semanas respecto a la fijación de horarios y las comparaciones entre los periodos de reposo que han tenido los distintos equipos. Con partidos todos los días, las jornadas se confunden en la cabeza de los espectadores, que ya no saben si están viendo los últimos encuentros de la 33ª o ya ha dado comienzo la 34ª. Muchos futbolistas se encuentran ante algo desconocido para ellos y aquí tienen ventaja los que llevan toda su carrera haciendo estos esfuerzos físicos y sobre todo mentales. Ignacio Martín apuesta por partidos de sesenta minutos en lugar de noventa como solución para una concentración de esfuerzos tan grande como la actual: «Hay estudios que acreditan que así se reduce el riesgo de lesión».