Operación Retorno

Obligatorio parar si presencias un accidente en carretera: así debes actuar

Este domingo 31 de agosto, con millones de vehículos en carretera, la DGT recuerda que no auxiliar en un siniestro puede ser delito. Saber cómo actuar ante un accidente es clave para proteger vidas

Imagen del accidente en la cámara de la DGT REMITIDA / HANDOUT por DGT Fotografía remitida a medios de comunicación exclusivamente para ilustrar la noticia a la que hace referencia la imagen, y citando la procedencia de la imagen en la firma 25/08/2025
Este domingo 31 de agosto, con millones de vehículos en carretera, la DGT recuerda que no auxiliar en un siniestro puede ser delito. Saber cómo actuar ante un accidente es clave para proteger vidasDGTEuropa Press

Este domingo 31 de agosto marca el punto álgido de la operación retorno en España, con más de cinco millones de desplazamientos previstos en las principales vías del país. En este contexto de máxima circulación, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha reforzado su mensaje: si presencias un accidente, estás legalmente obligado a detenerte y prestar auxilio. No hacerlo puede constituir un delito de omisión del deber de socorro, penado por el Código Penal con hasta 18 meses de prisión.

Ante un siniestro, el protocolo de actuación es claro. Lo primero es garantizar la seguridad propia: estacionar en un lugar seguro, activar las luces de emergencia y señalizar el vehículo con triángulos o dispositivos luminosos homologados. A continuación, se debe contactar con el 112, proporcionando información precisa sobre el lugar, número de afectados y estado del tráfico. Si se dispone de conocimientos en primeros auxilios, pueden aplicarse siempre que no se ponga en riesgo la integridad del herido.

Los primeros minutos tras un accidente son cruciales. Desde la DGT insisten en que la colaboración ciudadana puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Incluso si no se puede intervenir directamente, permanecer en el lugar y facilitar datos a los servicios de emergencia ya supone una contribución valiosa.

En un día como hoy, donde el volumen de tráfico alcanza niveles excepcionales y el riesgo de siniestros se multiplica, la responsabilidad individual cobra especial relevancia. La seguridad vial no solo depende de una conducción prudente, sino también de la capacidad de reacción ante situaciones críticas. Actuar con diligencia y humanidad no es solo una obligación legal: es un compromiso con la vida.