¿Deporte?

«Buzkashi», el sangriento deporte nacional de Afganistán en el que el balón es una cabra decapitada

Se trata de una práctica deportiva muy violenta y lo jinetes -se juega a caballo- suelen acabar bañados en sangre.

El «Buzkashi» suele acabar en un auténtico baño de sangre
El «Buzkashi» suele acabar en un auténtico baño de sangreArchivoLa Razon

El «Buzkashi» está considerado el deporte nacional de Afganistán pese a su carácter siniestro. Diez jinetes (chapandazan) por equipo, todos con látigos que no exclusivamente pueden usar solo para azotar a sus caballos, juegan con una cabra decapitada como pelota y se trata de marcar, que no es otra cosa que dar la vuelta a una bandera ubicada en un extremo del campo y dejar el cadáver en un círculo. El objetivo es simple, aunque alcanzarlo puede ser brutal. Para marcar, un jinete debe coger la «pelota», dar la vuelta a una bandera ubicada en un extremo del campo y dejar el cadáver en un círculo dibujado con tiza, llamado «círculo de la justicia». Existen normas y el juego sucio está mal visto, pero los jinetes contrarios harán casi cualquier cosa para impedir que los otros marquen. Se juega en un terreno de 400 metros de largo, a caballo, en dos partes de 45 minutos.

Se trata de un juego muy violento, donde tanto los jinetes como los caballos tienen que tener una preparación física muy alta y suelen acabar bañados en sangre.

Además, no siempre hay árbitro, así que a veces es un deporte muy peligroso. Para darle mayor dramatismo, es habitual que los ‘chapandaz’, con turbantes y barbas negras, lleguen a la cancha con fusiles Kalashnikov al hombro y guardaespaldas, aunque suele regir entre los jugadores cierto pacto de caballeros para que las cosas no vayan a mayores.

Este deporte, que se juega también en países como Tayikistán, Kazajistán o Kirguizistán, se disputa desde casi la Edad Media, aunque en los años de dominio talibán del país en los 90, estuvo prohibido. Sin embargo, el régimen talibán no lo prohibió por ser violento o cruel sino por ser un entretenimiento y, como muchos otros, era considerado “inmoral”.

Nadie sabe cómo surgió realmente el buzkashi (que en dari, la versión del idioma persa hablada en gran parte de Afganistán, significa «agarrar la cabra») en las estepas de Asia Central. Una de las teorías más populares es que evolucionó hace siglos como ejercicio de batalla para asaltantes mongoles. En la actualidad, se juega en toda Asia Central, con unas cuantas modificaciones. En Kirguistán y Kazajistán, juegan un formato en equipo en el que el becerro o la cabra se lanza a unas porterías elevadas. (Cada vez se utilizan más cadáveres falsos para complacer a los grupos por los derechos de los animales.) En el oeste de China, se utilizan yaks, no caballos, como monturas.