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Alves, un fichaje que descoloca a todos en Barcelona

Es el mejor lateral de la historia del Barça y para cubrir su añoranza lo han fichado con 38 años, lo que contradice la política de futuro post Messi

Dani Alves ha vuelto al Barcelona, donde estuvo entre 2008 y 2016. Ahora tiene 38 años
Dani Alves ha vuelto al Barcelona, donde estuvo entre 2008 y 2016. Ahora tiene 38 añoslarazon

Dani Alves solía tener una tarjeta de presentación. «¿Quién es el mejor jugador de la historia?», preguntaba el brasileño, e incluso respondía él mismo: «Messi». Y volvía a inquirir: «¿Quién es el jugador que más pases de gol ha dado a Messi?». La respuesta es que él. Era como un: «Nada más que añadir». Dani Alves ha sido posiblemente el mejor lateral derecho de la historia del Barcelona, lo que no quita que su vuelta al Camp Nou haya pillado de sorpresa a casi todos. Se habla en el club azulgrana de pasar página, de futuro, de una nueva era tras Messi, y se contrata al futbolista con el que triunfo Leo hace una década y que tiene 38 años. Xavi explicará los motivos el viernes antes del partido contra el Espanyol.

El caso es que si el futuro de Alves es una incógnita, a su pasado nadie puede poner un pero. Es el futbolista que más títulos ha ganado en la historia, con 44, aunque le falta el Mundial; y muchas veces ha sido dominador de toda la cancha desde una posición que habitualmente suele tener un papel más secundario. Alves en el Sevilla era el futbolista más importante del equipo desde el lateral derecho. Fichó por el Barcelona por 35 millones y pasó a ser el socio perfecto de Leo. Se marchó de la Ciudad Condal en 2016 mandando mensajes a la directiva de Josep Maria Bartomeu, incluso jugándosela: tras un par de veranos en los que se rumoreaba su traspaso por una cifra interesante, que si para aquí que si para allá, terminó marchándose gratis a la Juventus. Parecía el último gran contrato de su vida al fichar por el equipo turinés con 33 años, donde después compartiría vestuario con Cristiano Ronaldo, el antagonista de Messi, pero ha dado unas cuantas vueltas más: se fue al PSG, regresó a Brasil para jugar en el Sao Paulo y ahora estaba sin equipo hasta confirmarse su regreso al Barcelona. No podrá participar hasta enero.

No ha conseguido encontrar el Barcelona un futbolista de garantías en su posición. El lateral derecho se mueve ahora entre las dudas y la juventud de Dest, un futbolista con más participación que eficacia; la corrección de Mingueza, que cumple, pero el equipo necesita algo más; o el eterno acople de Sergio Roberto, que lleva años sufriendo lejos de su puesto de toda la vida de interior.

El fichaje de Alves sólo se puede explicar como un elemento más para poner orden y hacer cumplir las normas que ha puesto Xavi. De origen humilde, Alves trabajaba en el campo con sus padres de niño antes de ir a la escuela, para sacar tiempo por la tarde para entrenar. Empezó a jugar en el Bahia y rápidamente Monchi vio en él lo que después fue: lo fichó para el Sevilla por medio millón de euros y lo vendió al Barcelona por 35, en una época en la que la locura todavía no había llegado del todo al fútbol y no eran habituales los fichajes de 100 «kilos». Curiosamente, ésas son las únicas cifras que ha movido en traspasos en su carrera. Casi siempre se fue libre.