Valencia C.F.

El Valencia resuelve al final contra el Villarreal (1-3)

Con dos buenos goles en el descuento decantan la ida de cuartos de la Liga Europa a favor del conjunto de Marcelino

Kevin Gameiro y Xavi Quintilla
Kevin Gameiro y Xavi Quintillalarazon

No tiene prisa el Valencia ahora, no tiene urgencias después de pasar una temporada con mucho sufrimiento y alguna ansiedad. Pero los buenos momentos que está viviendo le da al equipo confianza para jugar partidos como el del Villarreal. No le va la vida: tiene la final de Copa y tiene la lucha por los puestos de la Champions. Y tiene seguridad en lo que hace. Si durante muchos días de esta campaña ha vivido una aguda crisis de confianza, ahora sabe que su plan suele ser el bueno para llegar a la victoria. Por eso no le importó dar el balón y el campo al equipo local y esperar. Y cuando llegaron sus ocasiones, en el descuento, ganó.

Y además, el tanto al comenzar el partido le puso la eliminatoria de cara. El penalti fue una metáfora del conjunto de Marcelino: falló Parejo, pero lo arregló Guedes. Si se equivoca, tiene capacidad de reacción.El Villarreal, sin embargo, no tiene esa posibilidad. Por eso Cazorla tiró el penalti como lo tiró, para vengarse de su pasado, para borrar las lágrimas. Esta vez lo metió y fue después a por la pelota para golpearla con rabia. No se le vio sonreír, él que ha hecho de la sonrisa una manera de estar en el mundo del fútbol. Aún le duele el falló en la última jornada de Liga.Los de Calleja empataron y llevaron todo el peso del partido, pese a que se juegan la vida el fin de semana en la Liga. Europa no vale nada si no pueden defender su puesto en la clasificación. Vive una situación complicada: la final a un paso, el infierno del descenso en el otro lado.

No tiene que ser sencillo manejar esas situaciones, pero Calleja lo está intentando, echando mano de todos y no dando por pérdida ninguna oportunidad.La Europa League tiene lo que ahora se puede considerar una peculiaridad: no hay VAR y por tanto las decisiones de los colegiados son definitivas. Acostumbrados ya al vídeo, cuando se señala un penalti se vive con la sensación de que en cualquier momento puede variar la decisión. Pero no, claro, aquí no. Los dos, estuvieron en el límite de lo que puede ser señalado o no. Hay contacto, pero es complicado saber si suficiente como para señalar la pena máxima. Michael Oliver, el colegiado inglés, no dudó sin embargo en las dos jugadas.

Fue el Villarreal quien llevó el peso del encuentro, pero fue el Valencia quien llevó más peligro, sobre todo al principio del encuentro y al final de la segunda mitad. Es un equipo que sabe cómo hacer daño, rápido y profundo, que no duda cuando huele la debilidad y el área contraria. Entre esos dos momentos del Valencia, el Villarreal dominó el partido, sin mordiente. Cazorla llevaba el mando del encuentro, casi desde la posición de mediocentro. Tiene calidad para cualquier cosa, aunque es probable que sea un futbolista más decisivo cuanto más cerca del área esté y tampoco tiene físico para aguantar el ritmo que exige esa posición. Pero jugó todo el choque.

Al ritmo de Cazorla, el Villarreal buscó el gol con la posesión y el Valencia con el vértigo, robando y saliendo. Y así ganó. Wass, cuando el partido acababa, y Guedes, decidieron la eliminatoria.