Kyrgios lanza un mensaje nada conciliador a Tsitsipas después de lo de Wimbledon

Superado el ecuador de la temporada en la ATP buena parte de los tenistas del circuito se han dado una tregua antes de afrontar la temporada norteamericana en pista rápida. Con los Masters 1.000 de Montreal y Cincinnati como campo de pruebas para el Abierto de Estados Unidos hay jugadores que van anunciando su calendario y entre ellos se encuentra Nick Kyrgios. El australiano después de haber alcanzado la final en Wimbledon donde cayó ante Novak Djokovic tiene previsto reaparecer en Washington. El torneo en la capital de Estados Unidos arranca el próximo lunes y Kyrgios va a competir en el cuadro individual y también en el de dobles.

El anuncio de su pareja en Washington fue tan peculiar como muchas de las acciones que protagoniza el jugador nacido en Canberra. “Estoy muy emocionado de anunciar que Jack Sock será mi compañero para el torneo de Washington. Estoy muy emocionado. He tenido a Tsitsipas como compañero en ese torneo, así que no puede ser peor que eso”, aseguró entre risas al recordar cuando compartió pista con el griego hace tres años. Sock, el que será su pareja en Washington, temiendo lo que se avecinaba soltó: “Es hora de salir de aquí cuanto antes”. Y es que la relación entre Kyrgios y Tsitsipas después de la tercera ronda en la pasada edición de Wimbledon es de todo menos amigable.

El duelo directo que se saldó con la victoria del australiano en cuatro sets (6-7, 6-4, 6-3 y 7-6) tuvo varios momentos muy calientes. El griego fue sancionado con 10.000 euros de multa por lanzar una pelota a la grada en un gesto de frustración tras un punto perdido. Kyrgios reclamó su descalificación, pero éste no se produjo. Nick no se quedó atrás. Fue castigado con 4.000 euros por soltar obscenidades que se escucharon perfectamente en la Central. Y eso después de haber tenido un incidente con un espectador al que escupió en una ronda anterior. Esto le costó una sanción de otros 10.000 euros.

Pese a todos los incidentes y salidas de tono, el australiano está teniendo una temporada notable. Después de la final en Wimbledon se ha colado en el top 50 -es el número 47 del mundo- y en Washington aparece como una de las principales amenazas para los cabezas de serie. Su temporada en hierba, después de haber alcanzado los cuartos de final en Indian Wells ha sido sobresaliente. Fue semifinalista en Stuttgart y Halle y alcanzó la final en Londres sin necesidad de jugar la semifinal por la retirada de Nadal.