El automóvil propone un plan para crear 1,5 millones de empleos en veinte años

La directiva de la asociación de fabricantes de automóviles, Anfac, mantuvo ayer una reunión en La Moncloa para presentar al presidente del Gobierno, Pedro Sanchez; a la vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera: a la ministra de Industria, Reyes Maroto; y al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, el llamado Plan de Automoción 2020-2040 para relanzar la industria española de construcción de automóviles. El plan contempla unas inversiones en este periodo de 54.000 millones de euros y elevaría la facturación de esta industria en 100.000 millones anuales, hasta llegar a los 310.000 millones de euros; además de crear 1,5 millones de empleos en el periodo.

En esta reunión al más alto nivel no se concretaron medidas inmediatas para el sector a corto plazo. Ni en el campo fiscal ni en el de ayudas para la renovación del parque. Según el presidente de Anfac, José Vicente de los Mozos, «se trata de compartir una hoja de ruta para el futuro y conseguir que España, además de lograr que sea un referente de movilidad sostenible, pueda mantener el nivel de fabricación actual. Para ello, es necesario un plan a medio plazo ya que los centros de decisión están en el extranjero y, a pesar de ello, nuestro país produce 2,8 millones de unidades con un mercado interior de sólo 1,2 millones», aseguró De los Mozos.

Cambio de movilidad

Para conseguir que la industria del automóvil siga representando el 10% del PIB, el 9% del empleo, el 15% de la recaudación fiscal y el 18% de las exportaciones, Anfac propone estas inversiones de 54.000 millones de las que la cuarta parteserán aportados por la empresas del sector y otra cuarta parte, 13.500 millones, deberán invertirse en infraestructuras eléctricas, ya que la proporción actual de ventas, en donde el 68% son motores gasolina, el 27% diésel y los eléctricos son residuales, se invertirá en el año 2040. En esa fecha se calcula que los electrificados serán un 65% de las ventas, un 15% de gas y el resto de hidrógeno. Aunque el diésel seguirá muy presente en el sector del transporte e irá siendo sustituido por el hidrógeno, que puede ser una gran fuente de ingresos para España.

Para De los Mozos, toda esta transformación futura abrirá nuevas oportunidades de negocios, como pueden ser componentes de software, gestión de datos de movilidad y gestión de la demanda.