España supera por primera vez los 300.000 millones en exportaciones pero dobla el déficit comercial por el coste de la energía

Una buena noticia no siempre trae una mejor, y en el caso de la balanza comercial mucho menos. Las exportaciones españolas batieron un nuevo récord en 2021 al superar por primera vez la barrera de los 300.000 millones de euros, un hito que no evitó que el déficit comercial se duplicara el pasado año debido a que el coste de comprar energía a otros países se disparó, especialmente en diciembre. El comercio exterior de mercancías refleja un crecimiento más acelerado de las importaciones que de las exportaciones, hasta situar el déficit en 26.178 millones de euros.

Las exportaciones españolas de bienes sumaron 316.609 millones de euros, un 21,2% más que un año antes y un 9,1% por encima del dato de 2019, justo antes de la pandemia y cuando marcaron un máximo histórico. Las importaciones crecieron un 24,8% respecto a 2020 y un 6,3% en comparación con su nivel prepandemia, hasta los 342.787 millones de euros, igualmente una cifra récord. Así se desprende del informe anual de comercio exterior de mercancías publicado este jueves y recogido por Efe, que refleja que esta subida en ambos casos contrasta con las caídas del ejercicio anterior, cuando las ventas a otros países retrocedieron un 10% y las compras al extranjero recularon otro 14,7%.

Dentro de estas, las importaciones de productos energéticos alcanzaron los 46.575 millones de euros, un 72,3% más que en el mismo periodo del año anterior. La tasa de cobertura, el cociente entre exportaciones e importaciones, se situó en el 92,4%, es decir 2,7 puntos menos que un año antes.

La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha señalado en un encuentro con periodistas que pese a haber aumentado notablemente, el importe del déficit comercial de España en 2021 es el segundo más pequeño del último lustro. Además, de cara a 2022 ha avanzado que se espera que la tendencia positiva de las exportaciones continúe -aunque en menor magnitud-, gracias a que ya se observa que los problemas en el transporte marítimo y los “cuellos de botella” se están resolviendo, mientras que por el contrario los precios de la energía y la falta de semiconductores suponen “riesgos” relevantes.

Las cifras del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo otorgan a la energía un peso clave en el saldo negativo comercial que presenta España al representar el 96,7% del total de este déficit (25.327 millones de euros), mientras que el no energético se situó en 852 millones. La importación energética generó un coste de 46.576 millones de euros, un 72% más que en 2020, aunque la subida de precios también benefició a España por el lado de las exportaciones, ya que vendió al exterior energía por valor de 21.250 millones de euros, un 70% más.

Solo en diciembre, el aumento de las importaciones de productos energéticos se disparó y el importe de la compras de energía subió un 157%, con el gas como protagonista del mayor repunte (408%), por delante de carbón y electricidad (226%), y petróleo y derivados (98,7%). Por componentes, destaca el aumento del gasto en adquirir carbón y electricidad (173%), por delante del incremento del gas (91%) y del petróleo y derivados (62%). El desglose por países corrobora la importancia de la energía: los dos mercados donde las importaciones españolas más aumentaron fueron Rusia (134%) y Emiratos Árabes Unidos (170 %), con Argelia también entre los destacados (89%).

En materia de exportaciones fueron los bienes de equipo (maquinaria, transporte y telecomunicaciones) los que encabezaron la estadística con 58.767 millones de euros, un 13,8% más, por encima de los 56.977 millones de alimentación y bebidas, cuyo crecimiento fue del 11,1%. Por detrás se situaron los sectores de los productos químicos, con 53.725 millones y un repunte del 32 %, y del automóvil, que todavía no se ha recuperado del todo de la fuerte bajada registrada en 2020 por la pandemia y sumó 40.450 millones en exportaciones (5 % más).

Las exportaciones se incrementaron sensiblemente por encima de la media en Ceuta (+107%), Madrid (+36,3%) y Asturias (+32,6%), aunque fue Cataluña la que en términos totales se mantuvo como la comunidad más vendedora con diferencia, con 80.538 millones. Sus exportaciones representaron el 25,4% del total y crecieron un 21,5% interanual. Le siguió la Comunidad de Madrid, con una contribución de 4,1 puntos y supusieron el 12,6% del total.

En cuanto a su distribución geográfica, el peso de la Unión Europea en las exportaciones españolas aumentó en 1,3 puntos, hasta concentrar el 61,8 % del total. Por países, Francia fue el principal destino de los bienes nacionales con un importe de 50.479 millones de euros, seguido por Alemania (32.399 millones), Italia (26.566 millones), Portugal (24.871 millones), Bélgica (14.405 millones) y Países Bajos (11.441 millones). Fuera de la Unión Europea destaca el crecimiento de las exportaciones de Estados Unidos (23,1% interanual), China (21,5%) o Reino Unido, que registró un crecimiento menos acusado lastrado en parte por la entrada en vigor del ‘Brexit’ en 2021.

En cuanto a los datos de exportadores, en 2021 se contabilizaron un total de 100.891 exportadores de más de 1.000 euros, un 14,1% mas que en el mismo periodo del año anterior. Pero más relevante que este dato es, según Comercio, el número de exportadores regulares, es decir, aquellos que han exportado en los últimos cuatro año. En 2021 se contabilizaron un total de 59.169 exportadores regulares, un 7,3% más que en el mismo periodo del año anterior, y exportaron por valor de 289.315 millones de euros, el 91,4% del total y un 17,7% más. Cabe destacar, además, que el número de exportadores regulares se ha disparado un 58,8% en 10 años, pasando de 37.253 en 2011 a 59.169 en 2021. En cuanto a las importaciones, las principales contribuciones positivas en el periodo 2021 provinieron de los sectores de productos energéticos (7,1 puntos), productos químicos (5,1 puntos), bienes de equipo (3,2 puntos) y semifacturas no químicas.