Eurozona

La escultura gigante del euro será subastada en octubre porque es muy cara de mantener

Símbolo de Europa y de la moneda común, desde 2001 era una de las imágenes más populares de Fráncfort al acompañar con su presencia la entrada de la antigua sede del BCE. El aumento del vandalismo ha motivado esta decisión

Escultura gigante del euro en Fráncfort
Escultura gigante del euro en FráncfortDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

La icónica escultura azul del euro, que desde 2001 ha simbolizado en Fráncfort, sede del Banco Central Europeo (BCE), “una Europa unida y una moneda común”, será subastada a mediados del próximo mes de octubre, después de que sus propietarios, la organización sin ánimo de lucro Frankfurter Kultur Komitee, no puedan hacer frente al fuerte aumento de los costes de mantenimiento del monumento.

Situada en la Plaza de Willy-Brandt de la capital financiera de Alemania, la escultura del euro, obra del artista alemán Ottmar Hörl, se había convertido desde 2001 en una de las imágenes más populares y fotografiadas de Fráncfort al acompañar con su presencia la entrada a la antigua sede del BCE, que a finales de 2014 se trasladó a su actual ubicación en el distrito Ostend de Fráncfort del Meno.

La escultura sobrevivió a las protestas violentas de movimientos de izquierdas y de anarquistas y a las acampadas del movimiento anticapitalista “Blockupy” durante la crisis financiera. Sin embargo, los propietarios de la escultura han explicado que la financiación de patrocinadores privados ya no es suficiente para mantener el símbolo del euro en condiciones técnicamente seguras, particularmente ante “el aumento del vandalismo en los últimos dos años”, que ha agotado todos los fondos de la asociación, impidiendo llevar a cabo otras actividades de la asociación.

El comité dejó de desarrollar algunas actividades, como el proyecto en contra del racismo en las escuelas de primaria en Fráncfort y en toda la región a las orillas del Rin y del Meno o un coloquio sobre Europa. Tras fracasar los intentos de asegurar la financiación, ya que nadie quiere mantenerla, el comité ha decidido que lo mejor es subastarla.

A este respecto, lamentan que “todos los intentos de asegurar la financiación del símbolo del euro han fracasado hasta ahora”, incluida la mesa redonda convocada al respecto el pasado 27 de abril, ya que los representantes invitados de la ciudad de Fráncfort del Meno, el BCE (que ha contribuido con 15.000 euros anuales a mantenerla) y el Ministerio de Finanzas de Hesse no pudieron asistir por diversas razones. “Muchos ciudadanos no saben quién es el propietario del símbolo del euro y qué importancia tiene en todo el mundo. Muchos creen que el símbolo del euro pertenece a la ciudad de Fráncfort del Meno o al Banco Central Europeo”, señalaron.

La escultura tiene 14 metros de altura y un peso de 50 toneladas. En la actualidad su iluminación se lleva a cabo con LED, lo que permitió un sustancial recorte del gasto en consumo de electricidad, que anteriormente era de unos 12.000 euros anuales. El símbolo del euro está rodeado por 12 estrellas que representan los primeros doce países que introdujeron el euro, en enero de 2002, aunque ahora ya usan la divisa los ciudadanos de 19 países y a partir del próximo año lo harán lo de 20, cuando Croacia entre el club.