Autónomos
Los cinco errores que más perjudican a autónomos y pymes al final del año
Desde Legálitas recomiendan una revisión "rigurosa" de las cuentas para no enfrentarse a futuros problemas con Hacienda
2025 está a punto de llegar a su fin, lo que significa que el ejercicio fiscal de muchas pequeñas empresas y autónomos también va a concluir en menos de un mes. Por ello, estos profesionales revisan sus cuentas con la intención de optimizar el cierre del año. Sin embargo, es habitual que cometan año tras año una serie de errores que les pueden acarrear sanciones administrativas. Por tanto, desde Legálitas Negocios han detectado cuáles son los cinco fallos más frecuentes que suelen realizar autónomos y pymes al finalizar cada año.
1. Confundir las compras de stock con gastos del año
Uno de los errores más habituales es que estos empresarios crean que todo el stock adquirido durante el ejercicio puede considerarse un gasto inmediato. No obstante, las existencias que no se han vendido no cuentan como gasto, sino como activo. Por tanto, solo se refleja como gasto en la cuenta de resultados el stock efectivamente vendido.
2. Comprar activos a última hora para intentar aumentar gastos
Para rebajar su beneficio, es frecuente que pymes y autónomos compren ordenadores, móviles u otros activos a finales de año. No obstante, este activo se adquiere durante más de un ejercicio y pasa a formar parte del patrimonio de la empresa. En este sentido, la empresa no genera un gasto inmediato, sino que está incorporando un bien que prestará servicio durante varios años.
"Por ese motivo, su coste no se descuenta de golpe, no es un gasto directo, sino a través de la amortización, y por lo tanto se van descontando de forma gradual conforme se va utilizando el activo", explican desde Legálitas Negocios.
3. Facturar servicios futuros como si fueran ingresos del ejercicio
Emitir en diciembre una factura que incluya servicios que se prestarán en enero o febrero y contabilizar todo el importe como ingreso del año actual es un error. Y es que solo se debe reconocer como ingreso la parte del servicio efectivamente prestado ese año. El resto se registrará como ingreso anticipado, ya que aún no se ha generado.
4. Registrar como gasto todo lo que figure en una factura
Si un autónomo o pyme recibe una factura en diciembre por servicios que le prestarán también el año que viene, no podrá deducirse todo el importe de una vez. Al igual que en el caso anterior, solo debe incluirse como gasto la parte correspondiente al ejercicio en curso. El importe restante se anota como gasto anticipado, puesto que el servicio aún no se ha recibido.
5. No declarar correctamente las subvenciones
Las subvenciones de explotación no reintegrables -las que no hay que devolver- deben registrarse como un ingreso más del ejercicio y tributar por ellas. Aunque estas no lleguen mediante factura, no significa que puedan omitirse en la cuenta de resultados. "Además, este tipo de ayudas no permite retrasar su declaración, por lo que deben incluirse en el año en que se conceden", afirman.
Para evitar repetir estos errores todos los años, desde Legálitas aseguran que los autónomos y pymes deberán llevar a cabo una revisión "rigurosa" de sus cuentas y contar con asesoramiento profesional para no enfrentarse a futuros problemas con Hacienda.