El consumo de ovino se desploma hasta dos kilos por persona al año

El de carne de porcino superó en 2017 los 52 kilos, diez kilos menos que hace una década.

El consumo de carne de ovino y caprino se ha desplomado durante los últimos años en nuestro país hasta situarse en poco más de dos kilos por persona y año. En concreto, y según las últimas estadísticas disponibles facilitados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en 2016 fue de 2,06 kilos per cápita, lo que supone unos 5,6 gramos diarios. Diez años antes, en 2006 fue de 4,78 kilos y en 2003 llegó a alcanzar los 5,71 kilos. La caída ha sido, por lo tanto, del 56,9% en la década que transcurre entre los años 2006 y 2016, y del 63,9% si se compara este último año con los datos contabilizados en 2003.

También se ha registrado un importante descenso en la producción de este tipo de carnes, ya que en 2003 rondaba las 250.000 toneladas mientras que en 2016 se situó en 126.000 toneladas. Por el contrario, el grado de autoabastecimiento ha aumentado pasando del 103% en 2003 hasta el 132% en 2016, pasando por un mínimo del 102,5% en 2005.

Por otro lado, el nivel de consumo de carne de ovino y caprino en nuestro país se encuentra muy lejos del que se registra para las carnes de vacuno y porcino. En el caso de esta última, y con estadísticas de 2017 ya disponibles, el consumo por persona y año se situó en 52,5 kilos, cifra más baja que la alcanzada justo diez años antes, en 2007, que fue de 62,3 kilos. El grado de auto abastecimiento en este sector fue del 174%. En el caso de la carne de vacuno el consumo se situó en 2016 en 12,9 kilos por persona y año; en 2006 fue de 14,9 kilos y justo diez años antes, en 1996, estaba en 13 kilos. El grado de autoabastecimiento se situó, por su parte, en el 107%.