Transporte ferroviario

Magyar Vagon presenta el aval de un banco húngaro por 620 millones para comprar Talgo

El consorcio avanza con otro de los trámites exigidos para adquirir la compañía española el mismo día que el Gobierno desvela que busca una alternativa nacional a la OPA húngara

Imagen del tren Talgo 250 híbrido que hace el recorrido Madrid-Galicia
Imagen de un tren Talgo 250 híbrido larazon

Ganz-MaVag Europe continúa quemando etapas para la adquisición de Talgo. El consorcio húngaro ha presentado hoy, tal y como avanzó LA RAZÓN que haría, el aval bancario que necesitaba para continuar adelante con su oferta pública de adquisición (OPA) sobre el fabricante de material rodante español.

El aval presentado para garantizar el importe de la operación, de casi 620 millones de euros, ha sido respaldado por un banco húngaro, según ha confirmado una fuente a Efe.

El documento ha sido entregado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) apurando el plazo estipulado de siete días hábiles que tenía para hacerlo desde la presentación del folleto de la OPA al supervisor bursátil el pasado 4 de abril.

El folleto con las condiciones de la oferta no es todavía público dado que la CNMV no desvelará su contenido hasta que el Gobierno autorice, si lo hace, la operación. El Ejecutivo se pronunciará una vez que haya recibido el informe preceptivo, aunque no vinculante, de la Junta de Inversiones Exteriores (JINVEX), un órgano en el que participan diversos ministerios pilotado por la Secretaría de Estado de Comercio, que dispone de tres meses para su evaluación. Este organismo tiene en su poder la documentación sobre la oferta desde el pasado 22 de marzo, tal y como confirmó el consorcio húngaro al regulador bursátil cuando depositó el folleto de la OPA.

Oferta alternativa

El consorcio húngaro ha dado un nuevo paso en su objetivo de hacerse con Talgo el mismo día que el Gobierno ha desvelado que está dispuesto a buscar una alternativa nacional para neutralizarla. Preguntado por la cuestión en un desayuno informativo organizado por Europa Press, el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha afirmado que "estamos observando la OPA [de Ganz-MaVag Europe] con el máximo cuidado y a la espera de que otros actores entren en juego, inversores y otros fabricantes" preferiblemente españoles, según ha asegurado. Esa alternativa, ha añadido Puente, podría no obstante construirse "sin el auspicio del Gobierno de España, pero si hubiera que auspiciarla, valoraríamos esa opción.En eso estamos", ha remachado.

Desde que el consorcio húngaro anunció a finales del año pasado su intención de lanzar una oferta por el fabricante de trenes español, el Gobierno ha manifestado su desconfianza hacia una operación que considera sospechosa por las posibles conexiones de Ganz-MaVag Europe con Rusia. El consorcio está liderado por los empresarios György Bacsa y András Tombor. Este último es un empresario al que algunas fuentes vinculan con el gabinete de seguridad de Victor Orban entre los años 1998 y 2002. Orban, actual presidente húngaro, es un político al que se considera muy cercano a Vladimir Putin, presidente de Rusia.

Magyar Vagon, además, se creó en 2020 por Kristóf Szalay-Bobrovniczky, actual ministro húngaro de Defensa de Orban, y se ha consolidado en el sector ferroviario a través de privatizaciones en Hungría aprovechando su proximidad al Gobierno de Orbán.

Puente ha vuelto a dejar patente hoy la desconfianza hacia la oferta húngara al referirse al incremento de capacidadque, según Ganz-MaVag Europe, le aportaría a Talgo. El ministro ha reconocido que es evidente que el fabricante ferroviario tiene muchos pedidos que debe atender -su cartera asciende en este momento a más de 4.000 millones de euros- y es evidente que necesita que le aporten capacidad de producción. Sin embargo, ha añadido, "no tenemos claro que las fábricas de Hungría [que tiene Ganz-MaVag Europe y que suman más de medio millón de metros cuadrados] puedan adaptarse a la tecnología de Talgo y resolver sus problemas". "No es lo mismo tener una fábrica ahí, bueno, pues medio vacía, con una mano de obra acostumbrada, por ejemplo, a amolturar, que la tecnología de soldadura de aluminio. No parece que sea eso tan fácil de hacer en Hungría como se dice", ha justificado.

El ministro ha asegurado que aunque Tango es el fabricante de material rodante ferroviario español más pequeño, por "carácter histórico, españolidad y tecnología", el Gobierno debe protegerlo.