Empleo

El mercado laboral necesita firmar casi cuatro contratos para sumar apenas uno indefinido

En 12 meses han hecho falta medio millón de contratos para bajar el paro en solo 154.000 personas

MADRID.-El Gobierno de España da luz verde a la rebaja de jornada, el proyecto 'estrella' de Yolanda Díaz para esta legislatura
Yolanda DíazEuropa Press

El paro bajó en abril en 67.420 personas, un 2,61% menos que el mes pasado, dejando el paro registrado en 2,513 millones, y con una afiliación que superó los 21,5 millones de ocupados, descontados la estacionalidad y el efecto calendario. Esto supone un aumento de 483.358 ocupados en el último año (+2,3%) y de 69.160 en el último mes. Y lo hizo en toda España –menos en Ceuta– gracias, principalmente, al tirón de las contrataciones en Semana Santa y el Puente de Mayo y al inicio de la temporada alta vacacional, que prepara ya el sector turístico de cara al verano.

Un impulso que ha servido para que el número total de contratos registrados haya superado los 1,14 millones, pero de ellos únicamente 507.903 fueron de carácter indefinido, representando el 44,52% de todos los contratos, en línea con el año pasado (44,1%), pero muy por debajo del año 2022 (48,2%). Aunque hay más de 15 millones de ocupados con contrato indefinido, solo 9,9 millones trabajan a tiempo completo. El número de fijos discontinuos se ha estabilizado y representa el 5,8% del total y el peso de los trabajadores temporales se mantiene por debajo del 12% (en concreto en el 11,9%).

Paro registrado en España
Paro registrado en EspañaMiguel RosellóLa Razón

Sin embargo, es sorprendente que se hayan firmado casi medio millón de contratos en el último año, pero el paro haya disminuido en 154.000 personas en 12 meses, lo que demuestra que se necesitan casi cuatro contratos para sumar uno indefinido. «Un contrato indefinido ya no es garantía de empleo», avisa Joaquín Pérez, secretario general de USO. En abril, la contratación global se resintió con respecto al año pasado en un 10%, con el agravante de que la tradicional temporalidad del sector servicios se ha visto superada por la industria, que apenas firma un contrato indefinido de cada cuatro.

Además, un tercio de los contratos que se consideran «indefinidos» son de fijos discontinuos para encarar la temporada turística. «Ese tipo de contratación no es la que genera empleo y son una gran señal roja de peligro».

Aunque el paro mantiene una tendencia descendente, la contratación de larga duración a jornada completa es la que más ha bajado con respecto al mes pasado, ya que únicamente el 38% de estos contratos tienen la jornada total. Asimismo, se mantiene abierta un oculta brecha de género, ya que la temporalidad se ceba especialmente con las mujeres, con el 48% de las contrataciones de duración determinada, por el 40% de los hombres.

En el caso de los autónomos, la situación es contradictoria: pese a que se han superado los 3,40 millones de afiliados al RETA –una cifra muy cercana al récord que se alcanzó en el año 2008 con 3,41 millones–, es preocupante la pérdida de empleo entre las pymes y microempresas. Por ejemplo, han desaparecido 10.000 autónomos del sector del comercio; es muy significativa la reducción de 63.000 cuentas de cotización en marzo en comparación al mismo mes de 2019, algo que se traduce en 63.000 empleadores menos; y se han perdido en torno a 36.000 afiliados en agricultura y régimen de hogar desde que se aprobó la nueva legislación.

Esto «pone de manifiesto que en estos sectores, donde la presencia del SMI es tan elevada como la subida superior al 60%, ha sido nefasta y llevan ya meses e incluso años destruyendo empleo», ha denunciado Lorenzo Amor, presidente de ATA, que advierte de que la aprobación por parte del Gobierno de la reducción de jornada «va a castigar muy duramente a los autónomos empleadores y a las pymes».