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«7D. El debate decisivo»: Cuando la política sí importa

Atresmedia hizo historia con «7D: El debate decisivo», que se convirtió en la emisión más vista del año con una cuota de pantalla del 48,2 por ciento y 9,2 millones de espectadores

Una pantalla de televisión emitiendo el debate en un bar de Málaga
Una pantalla de televisión emitiendo el debate en un bar de Málagalarazon

Atresmedia hizo historia con «7D: El debate decisivo», que se convirtió en la emisión más vista del año con una cuota de pantalla del 48,2 por ciento y 9,2 millones de espectadores

El lunes Atresmedia dio un golpe de autoridad en la mesa y se confirmó como la referencia informativa de la televisión en España modificando con rotundidad la forma de plantear los debates electorales con un modelo mucho más flexible y, lo más importante, en el que los participantes no conocían las noticias. La mitad de los españoles que estaban viendo la televisión en horario «prime time» eligieron las cadenas del grupo para seguir «7D: el debate decisivo», que sí lo fue al menos el términos de audiencia, ya que tuvo picos de hasta el 55,5 por ciento, un dato que tiene aún más valor si se tiene en cuenta que la emisión se celebraba en pleno puente cuando suele bajar el consumo televisivo. La media también tiene dígitos de récord comparables con las emisiones en abierto de los partidos más señeros de la Champions.

Un 51,3 en el minuto de oro

El programa conducido por Vicente Vallés y Ana Pastor tuvo una cuota de pantalla del 48,2 por ciento y más de 9,2 millones de espectadores que vieron cómo Soraya Sáenz de Santamaría, Pedro Sánchez, Albert Rivera y Pablo Iglesias se batían el cobre en un intercambio de preguntas, repreguntas y respuestas dinámico y ágil en el que hubo momentos de tensión pero no de crispación. Con estas cifras es evidente que también logró el codiciado minuto de oro, concretamente a las 22:39 horas cuando Soraya Sáenz de Santamaría, en el apartado de recortes, decía que «habían cumplido con el déficit público, podremos bajar impuestos y se ha hecho una importante reforma de la administración». En esos 60 segundos, la cuota de pantalla subió hasta el 51,3 del «share» y más de diez millones de espectadores. También fue el programa más visto de la temporada al superar en 700.000 espectadores la cuota del pasado 11 de noviembre cuando Mediaset emitió en sus canales la película «Ocho apellidos vascos». La emisión fue líder en todo el territorio nacional, con una supremacía indiscutible. Los datos de la comunidad de Madrid son apabullantes, con un 60,3 por ciento de cuota. Le siguieron Castilla y León (53,2), Galicia (52,8), Aragón (51,7 por ciento de «share», y Castilla-La Mancha (51,2 por ciento). En el target comercial –muy apreciado por los anunciantes– las cifras también fueron espectaculares ya que obtuvo un 51,8 por ciento de cuota. Entre el público masculino logró un 50,3 por ciento de cuota. La expectación era tal que lideró en todas las franjas de edad, pero es especialmente significativo que registrase datos del 52,2 por ciento entre el público de 25 a 34 años y del 50 entre los espectadores de entre 35 y 44 años.

El éxito de audiencia se fue consolidando a primeras horas de la tarde, cuando Susanna Griso en Antena 3 y Antonio García Ferreras en laSexta iniciaban las previas en las que expertos en lenguaje no verbal y liderazgo expusieron sus opiniones. En ambos programas se cubrió uno de los momentos más novedosos de la emisión: el recorrido de los diferentes debatientes entre su lugar de origen y su llegada a la sede de Atresmedia que se pudo ver a través de una cámara muda, gracias a la que, a través de sus imágenes, se podía tomar el pulso anímico de los que iban a intervenir minutos después. La cuota de pantalla llegó al 27,1 por ciento y 4,4 millones de televidentes, unas cifras para la franja de tarde más que significativas. Tras el debate, Griso y García Ferreras volvieron a tomar el testigo y se volvieron a reventar los audímetros con un 40.2 por ciento del «share» y 4,1 millones de seguidores.

El impacto en las redes sociales fue brutal durante toda la jornada: «trending topic» nacional durante doce horas y el primero mundial durante cinco. Atresmedia logró el récord del año en Twitter con 2,5 millones de tuits y más de 300.000 autores únicos. Atresplayer vivió también vivió un día de gloria con un récord histórico, puesto que sumó 307.408 espectadores. Por países destacaron España (78,5 por ciento), Reino Unido (4,7), Alemania (2,6) y Francia (2,3) y fue seguido en más de 160 naciones.