PNV y Bildu empatarían a 29 escaños, según el sondeo del Gobierno Vasco

A menos de un mes ya de las elecciones autonómicas en el País Vasco, las encuestas señalan que la pugna entre PNV y Bildu por la victoria está muy apretada. Tanto que el sondeo publicado este miércoles por el propio Gobierno vasco proyecta un empate a 29 escaños entre ambas formaciones, que se quedarían bastante lejos de los 38 parlamentarios que se necesitan para conseguir la mayoría absoluta. En este sentido, el PSE quedaría como grupo determinante al quedarse con 10 escaños, mientras que el PP mantendría los seis actuales. Sumar cosecharía tan solo un diputado.

De esta manera, la encuesta recoge un ligero retroceso del PNV de Imanol Pradales, que pasaría de los 31 que tiene actualmente Íñigo Urkullu a 29, mientras que Bildu registraría un notable incremento, logrando ocho diputados más. Entre nacionalistas vascos e izquierda abertzale sumarían 58 de los 75 escaños que reparte el Parlamento vasco y eso permitiría a ambos partidos gobernar en coalición, aunque ese escenario parece inviable, por ahora. No obstante, esa fuerza sí daría para hacer un frente común y meter más presión a Pedro Sánchez con avances en las cesiones al País Vasco, teniendo en cuenta que el candidato del PNV puede lograr mayor capacidad de entendimiento con Bildu ya que tiene un discurso más duro y apuesta abiertamente por la independencia, a diferencia de Íñigo Urkullu, que ha tenido un perfil más gestor.

PNV y Bildu sumaron 52 escaños y el 66% de los votos en las elecciones de 2020, mientras que ahora llegarían a los 58 parlamentarios, aunque se quedarían en un parecido porcentaje de voto (en torno al 67%), según la encuesta del Gobierno vasco. Es decir, ambas formaciones lograrían rentabilizar mucho mejor los votos ya que la participación aumentaría en 10 puntos con respecto a 2020, cuando las elecciones se celebraron en un paréntesis de la fase más dura de la pandemia (julio).

El PNV perdería un escaño por Guipúzcoa y otro por Vizcaya, bastión del partido. En cambio, Bildu crecería en las tres circunscripciones: Álava (3), Vizcaya (3) y Guipúzcoa (2). En todo caso, de confirmarse los resultados que proyecta la encuesta del Gobierno vasco, la izquierda abertzale lograría consolidar su empuje en los últimos años y situarse como un partido con serias aspiraciones a conquistar la presidencia vasca. En este sentido, las dos últimas citas electorales ya han indicado un deterioro del PNV frente a la consolidación de Bildu.

En las elecciones municipales, el PNV se dejó casi 90.000 votos, mientras que en las generales perdió 100.000 papeletas, lo que le dejó en cinco escaños en el Congreso (tenía seis en la pasada legislatura). Bildu creció bastante, lo suficiente para acercarse al "sorpasso" a los nacionalistas vascos: ganó 17.000 en las municipales y 55.000 en las generales.

El PSE de Eneko Andueza tendrá toda la presión encima ya que tendrá que decidir entre PNV o Bildu. Los socialistas vascos niegan por activa y por pasiva que vayan a apoyar a la izquierda abertzale, pero la credibilidad está bajo mínimos tras la reciente entrega de la alcaldía de Pamplona a Bildu. El PSE, que ha gobernado junto al PNV, mantendría los mismos escaños que en 2020.

El PP de Javier de Andrés se quedaría en los seis que ya ostenta actualmente, aunque los populares confían en mejorar todavía más: el candidato está haciendo una campaña muy centrada en la gestión económica del PNV para tratar de arañarle todo el votante posible.

Finalmente, Vox y Sumar son los partidos que peor parados salen de estas elecciones vascas. Según el sondeo, Santiago Abascal se quedaría sin representación en el Parlamento de su tierra: actualmente tiene un escaño por Álava, pero la encuesta le deja a cero. En cambio, el partido de Yolanda Díaz se quedaría en un parlamentario tras haber logrado seis en 2020: es decir, Sumar sufriría un importante transvase hacia Bildu.