Urkullu baraja un adelanto electoral para el mes de abril

El lendakari, Iñigo Urkullu, ha consultado este martes con los miembros del Ejecutivo vasco, de forma oficial y en el seno del Consejo de Gobierno, sobre la conveniencia o no de adelantar la fecha de las elecciones autonómicas, que en principio deberían celebrarse en septiembre u octubre, aunque el contenido de estas reflexiones no ha sido dado a conocer por el carácter “secreto” de las deliberaciones del Consejo de Gobierno.

Aunque Urkullu y su equipo ya habían debatido de manera informal sobre la fecha de las próximas elecciones es la primera vez que se aborda de forma oficial en un Consejo de Gobierno. En todo caso, el portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, precisó que será el lendakari quien decida si esta «reflexión» constituye o no el primer trámite legal para la convocatoria de los comicios vascos.

La Ley de Gobierno del País Vasco establece en su artículo 50 que “el lendakari podrá, bajo su exclusiva responsabilidad y previa deliberación del Gobierno, disolver el Parlamento”. El decreto de disolución de la Cámara deberá incluir, tal y como se indica en el artículo 51 de esa misma Ley de Gobierno, la fecha de convocatoria y celebración de las nuevas elecciones. Y antes de ello debe plantear una deliberación o debate sobre ello en el Consejo de Gobierno. No obstante, es el propio Urkullu quien debe decidir si la “reflexión” que se ha abierto hoy constituye o no la “deliberación” de la que se habla en la Ley de Gobierno como paso previo a la convocatoria de las elecciones autonómicas o si, por el contrario, dicho trámite se debe cumplir en un próximo Consejo de Gobierno.

¿Elecciones el 5 de abril?

En País Vasco ya se habla del 5 de abril como fecha para las elecciones vascas, pero es algo que no han exteriorizado públicamente y que tampoco han consultado con la oposición. Otra posibilidad sería a lo largo del mes de abril, antes o después de Semana Santa. El PNV celebra de manera significativa el Día de la Patria Vasca cada domingo de resurrección y este día podría servir bien como el pistoletazo de salida de la campaña, como cierre de la misma o para celebrar los resultados. En cualquier caso ese día será clave ya que también EH Bildu lo celebra a lo grande y podría servir a ambos como una forma de mostrar músculo.

También podrían ligar la fecha al mes de mayo o junio, haciéndolas coincidir con las elecciones catalanas. Quim Torra manifestó que anunciaría el adelanto electoral después de que se aprobaran los presupuestos en Cataluña, -18 de marzo-. Dependiendo de eso, Torra podría convocar cuando considere que, según algunas fuentes podría ser antes de verano. Si no, podría estirarlo hasta el mes de octubre, fecha que convendría más a los de Junts x Cat ya que juegan con los tiempos y las encuestas con la mirada puesta en el desgaste de ERC.

Sin embargo, algunas fuentes consultadas consideran que al PNV “no le convendría” hacerlas al mismo tiempo que Cataluña ya que significaría ligar los comicios al secesionismo y con ello resaltar el programa vasco de autogobierno y del nuevo estatuto vasco; cuando durante la campaña apostaban por rebajar el órdago.

Un adelanto electoral antes de agotar la legislatura, es decir; antes de octubre, frenará el calendario de proyectos de ley que el PNV tenía previsto aprobar para 2020 y se verían frustrados ya que no habría tiempo para el debate y posterior aprobación. Sin embargo, tal vez los nacionalistas vascos prefieren “sacrificarlos” por obtener mejores réditos electorales. “Esto es siempre así, la actividad del Gobierno se paraliza en gran medida, y el Parlamento se disuelve”, señaló Erkoreka. No obstante, aseguró que no cree que exista problema alguno para que el Gobierno Vasco pueda asumir nuevas competencias si, en las próximas semanas o meses, fructifica el proceso de negociaciones que se reiniciará este próximo martes con el Ejecutivo central. Y es que los vascos tienen su destino ligado al PSOE en el Congreso de los Diputados y los socialistas vascos al PNV e incluso Podemos.

Actualmente el PNV gobierna en coalición con el PSEaexpensas de un solo voto para la mayoría absoluta por lo que necesitan de cualquier otro partido para sacar adelante cualquier norma o proyecto. Han conseguido ya aprobar los presupuestos vascos con el aval de Podemos y no tener que prorrogarlos por lo que podrían aguantar el tirón hasta octubre de manera que no tendrían más prisa que la estrategia demoscópica que le darían la mayoría absoluta a PNV y PSE.

En los primeros pasos de la legislatura el PNV sacó adelante también los presupuestos entonces gracias a los acuerdos con un PP de Rajoy que necesitaba de su ayuda en los Presupuestos Generales aunque, cuando Aitor Esteban dio el “sí” en el Congreso a los Presupuestos, cinco días después se unió a la moción de censura contra el entonces líder del PP.

Fuentes populares apuntan a que en el País Vasco la legislatura ya está agotada y ya no hay “punch” político.

Tradicionalmente las elecciones vascas siempre han coincidido con las gallegas ya que el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo ha preferido adelantarlas a la vez para evitar que haya tantas convocatorias. Por eso, esta vez bien podrían coincidir las catalanas, gallegas y vascas o solo dos. Aún las fechas son una incógnita.