Guardia Civil

De los Cobos se plantea llevar al juez su despido «político»

El coronel destituido podría acreditar ante los tribunales las peticiones que le hicieron para que revelara al ministro lo que investigaba la juez del 8-M

El coronel de la Guardia Civil, Diego Pérez de los Cobos, sopesa presentar un recurso ante la justicia contra el Ministerio del Interior, al considerar que su cese se produjo de forma irregular y no ajustado a la legalidad, según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del asunto.

El mando de la Benemérita contaría con «evidencias» –se desconoce cuáles son– con las que avalarían de manera indubitable todo lo ocurrido en torno a su cese, y las distintas llamadas que tuvo hasta que se le comunicó, finalmente, la destitución que corrió a cargo del ya dimitido Laurentino Ceña, entonces Director de Apoyo Operativo.

En esas «evidencias», quedaría clara la postura de Pérez de los Cobos de explicar a sus interlocutores, de forma nítida, que no podía facilitar información sobre las diligencias que tramitaba la Unidad de Policía Judicial (UPJ) de su Comandancia.

Los agentes actuaban a las órdenes de la titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Carmen Rodríguez Medel, en torno a lo ocurrido con la autorización de manifestaciones y eventos en la capital cuando ya se tenían noticias ciertas del peligro del coronavirus.

Pérez de los Cobos habría manifestado, como ha acreditado con posterioridad la jueza, que eran sólo los citados agentes los que debían tener conocimiento de las diligencias y que no podían informar a nadie de su contenido en ningún caso.

Asociaciones de jueces y fiscales han llegado a pedir la restitución en su puesto del coronel destituido al entender que debía permanecer en el mismo hasta que concluyeran las investigaciones en marcha. Destacaban, asimismo, que el militar había actuado correctamente al negarse a dar una información que, además, según manifestó, no podía tener en detalle por las referidas instrucciones de la jueza.

El primer sorprendido, cuando se le empezaron a pedir esos datos, fue el propio Pérez de los Cobos. El asunto, según las citadas fuentes, se habría generado en Presidencia del Gobierno, al tener conocimiento, a través de una noticia de prensa, de las diligencias que instruía Carmen Rodríguez Medel. La reacción inmediata fue ponerse en contacto con el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, para preguntarle si tenía detalles de lo que ocurría con la investigación. Y, a partir de ahí, se suceden los hechos que concluyen con la destitución de Pérez de los Cobos, de una manera «tan abrupta».

El coronel se encuentra en estos momentos en su domicilio de Madrid, «muy tranquilo, pero entristecido por lo que ha ocurrido sobre todo después de los 40 años que lleva prestando servicio en la Guardia Civil», según las citadas fuentes. Si presenta finalmente el recurso, sería el segundo coronel de la Guardia Civil que lo hace y que también fue cesado por el Gobierno socialista. Se trata del que fuera jefe de la Unidad Central Operativa (UCO), Manuel Sánchez Corbí, que está a la espera de la sentencia que ya debería haber dictado la Audiencia Nacional y que se ha retrasado por causa de la paralización de la justicia con motivo de la pandemia del coronavirus.

En medios de la Guardia Civil consultados por este periódico se subraya esta circunstancia: dos coroneles con una excelente proyección profesional dentro de la Benemérita, Corbí y Pérez de los Cobos, cesados por un ministro del Interior socialista, que, además, fue juez antiterrorista en la Audiencia Nacional.

También han sorprendido las noticias que, al hilo de todo lo ocurrido, han difundido algunos medios en el sentido de que mandos del Cuerpo están poco menos que conspirando contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Y, de paso, ante esta falsedad, pedir la desmilitarización de la Benemérita. «Afirmar esto es desconocer lo que es la Guardia Civil que, precisamente por su carácter militar y jerarquización, está a las órdenes del Gobierno de turno y, siempre, al servicio de todos los españoles, como ha demostrado en sus 176 años de historia. Lealtad que, lógico, debe ser mutua», agregan los mismos medios.

«Llama la atención que no hace muchas semanas, la Guardia Civil, por una mala interpretación de unas palabras del general Santiago, estuviera, como se dijo, al servicio del Gobierno socialista para espiar a todos los españoles. Y que, pasado el tiempo, se diga todo lo contrario», enfatizan las mismas fuentes, sorprendidas por el cariz de los acontecimientos. En todo caso, no se entiende que Marlaska optara por hacer una demostración de quién es el que manda, con unos modos que quienes conocen a Pérez de los Cobos aseguran que no merece.