ETA

43 presos de ETA pasan al 100.2 como paso previo a su libertad

El «plan Sortu», ideado por Otegui, de progresión de grados. Los reclusos sólo tienen que aceptar la «legalidad penitenciaria», sin colaborar con la Justicia

El «plan Sortu», que dirige Arnaldo Otegui y que fue uno de los puntos que estuvo, según todos los indicios, sobre la mesa de negociaciones con el fin de que EhBildu apoyara a Pedro Sánchez para ser presidente del Gobierno, avanza de forma inexorable.

El objetivo final es la libertad de todos los reclusos de ETA, sin que tengan que cumplir sus condenas, una vez hayan sido acercados a cárceles del País Vasco y transferidas las competencias de Instituciones penitenciarias al Ejecutivo de Vitoria.

Frente a una nueva amnistía pura y dura, como preconizan los disidentes de ETA, este plan pretende hacer las cosas «sin prisas, pero sin pausas», para no indignar a la opinión pública, en especial a las víctimas (aunque estos último no parecen haberlo logrado tras los acercamientos).

A cambio de aceptar lo que llaman «la legalidad penitenciaria», sin tener que pedir perdón a las víctimas ni colaborar con la Justicia, los presos terroristas van obteniendo beneficios y, según se ha sabido ahora, gracias a las revelaciones del propio entorno etarra, a 43 internos de la banda se les han concedido los beneficios del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario.

Se les mantiene en el primer grado pero se flexibiliza de forma importante el régimen de vida dentro de la cárcel. De hecho, pasan a módulos ordinarios y pueden realizar determinados trabajos. Pero es sólo el principio.

Lo que subyace, en cualquier caso, es que se trata del primer paso para alcanzar el segundo y tercer grado y los consiguientes permisos, la libertad provisional, etcétera. Recientemente, dos terroristas han salido en libertad provisional y no tardará en producirse nuevos casos.

Desde dicho entorno, se quejan, precisamente, de que las progresiones no van con el ritmo que pretenden. Pero, según las fuentes consultadas por LA RAZÓN, no pasa de ser una impostura ya que para ellos lo importante es que su plan siga en marcha, como, de hecho, ocurre.

Por «quejarse» les parecen pocos y rácanos el casi medio centenar de acercamientos, ya que, según exponen, quieren a todos los internos en el País Vasco. La concesión del 100.2 a los citados 43 reclusos es un paso, pero insuficiente, dicen.

La sensación entre las víctimas es que el Gobierno ha iniciado un camino, como contraprestación al apoyo prestado a Sánchez por Bildu, que no tiene marcha atrás; tendrá altibajos, periodos de más o menos actividad, pero concluirá con lo que pretenden Otegui y los suyos: la libertad de los presos etarras en el menor plazo.

Los 43 del 100.2 del Reglamento Penitenciario pueden acceder a todas las actividades que corresponden a un segundo grado. «Es un pequeño paso hacia ese segundo grado, pero tenemos presos que llevan un año con el 100.2 y no terminan de pasar al segundo por lo que siguen sin poder acceder a permisos ni progresar a un tercer grado”, reclaman desde el mundo proetarra.

Reconocen que muchos presos han pedido un destino de trabajo para poder progresar de grado y tener una actividad o formación de cara a su salida, que aumente su capacidad para ganarse la vida después de la liberación». Pero la realidad es otra.

Algunos de estos trabajos son remunerados y al preso le permiten cotizar a la Seguridad Social. Algunos reclusos, no obstante, optan por tener una prestación de desempleo en la calle o dejar de trabajar y acceder al subsidio por excarcelación.

14 están en el País Vasco

14 presos de ETA se encuentran ya en cárceles del País Vasco, en situaciones de semilibertad o cumpliendo condena en su casa por padecer enfermedades.

El resto, están distribuidos por la geografía nacional: Pontevedra, 4; Almería, 4; Brieva (Ávila), 2; Cáceres, 2; La Coruña, 7; Dueñas (Palencia), 1; Estremera (Madrid), 4; Herrera de la Mancha (Ciudad Real), 6; Logroño, 5; Monterroso (Lugo), 2; Alicante, 8; Aranjuez, 7; Burgos, 3; Castellón, 12; Daroca (Zaragoza), 1; El Dueso (Cantabria), 1; Granada, 9; Huelva, 7; Jaén. 6; Mansilla de las Mulas (León), 3; Murcia, 1; Algeciras, 5; Badajoz, 1; Córdoba, 7; Ocaña, 4; Puerto de Santa María, 18; Sevilla, 8; Soria, 4; Soto del Valladolid, 1 Real, 2; Teruel, 1; Topas (Salamanca), 5; Valdemoro, 1; Valencia, 9; y Zuera (Zaragoza), 7.