CGPJ

Sólo tres de los 147 vocales del CGPJ fueron elegidos por consenso

Las designaciones en las Cortes han sido cuotas de partidos, salvo dos en 1980 y una en 2001

Carlos Lesmes, presidente del CGPJ, durante la apertura del año judicial.
Carlos Lesmes, presidente del CGPJ, durante la apertura del año judicial.Cipriano PastranoLa Razón

La designación de los vocales del Consejo General del Poder Judicial por el turno judicial tuvo un punto de inflexión en 1985, cuando el entonces presido por Felipe González decidió modificar el sistema para que, a partir de entonces, fuesen elegidos por Congreso y Senado con la misma mayoría que establece la Constitución para los vocales judiciales.

Este cambio radical originó un conflicto de competencias ante el Tribunal Constitucional promovido por el entonces presidente del recurso del Grupo Parlamentario Popular contra esa reforma, que fue desestimado. De esa forma, en 1986, el TC avaló la designación parlamentaria de esos 12 vocales, aunque especificaba que en modo alguno ello podría significar que se convirtieran en una prolongación de los partidos políticos con mayor representación parlamentaria.

«Cambio de cromos»

Sin embargo, la realidad no ha sido así, ni mucho menos. En concreto, según datos facilitados a LA RAZÓN por fuentes solventes desde 1980 hasta hoy, dejando al margen los 12 vocales que nombraron los jueces en el primer CGPJ, el Parlamento ha nombrado 147 vocales, computando los procedentes del turno de jueces como por los de juristas.

Del total de 147 vocales, 144 lo fueron por reparto de «cromos», es decir, por cuotas de partidos con más representación en cada momento o cuyos votos eran necesarios para alcanzar la mayoría de 3/5 necesaria que había lograr para llevar cabo la renovación del órgano de gobierno de los jueces y magistrados : La extinta UCD, PP, PSOE, IU, CIU, PNV o Coalición Canaria.

Por tanto, sólo tres vocales en todas estas renovaciones han sido designado por consenso: dos en 1980, toda vez que de los 8 juristas que eligió el Parlamento tres eran de «cuota» de UCD, tres de PSOE, y dos de consenso entre UCD y PSOE). El tercer vocal de consenso fue en 2001 y se produjo por el acuerdo entre PP y PSOE.

Los primeros vocales designados por acuerdo entre las principales fuerzas políticas de ese momento, UCD y PSOE fueron Agustín Azparren Gaztambide, que aunque era magistrado fue nombrado vocal por el turno de jurista, y el abogado Gonzalo Casado Herce.

El elegido en 2001 por consenso entre PP y PSOE fue Agustín Azparren Lucas , magistrado jubilado, hijo de Azparren Gaztambide, y uno de los impulsores en su momento del Foro Judicial Independiente.

Por tanto, los datos son tozudos y vienen a indicar que salvo algo muy excepcional, los partidos no han tenido el más mínimo reparo en nombrar vocales de su confianza –aunque en algún caso posteriormente se hayan desmarcado– tanto en los procedentes del turno judicial como del de jurista. Esta situación es la que ha derivado en que se hable con toda normalidad de la existencia de dos «grupos» dentro del Consejo General del Poder Judicial: «Conservador» y «progresista». De hecho, lo habitual es que se vote en bloque, siendo, en cambio, muy pocas veces donde existe un consenso amplio, sobre todo en temas relevantes.

Esta especie de «prolongación» de los partidos a la distintas composiciones del CGPJ también se ha visto, en cierta medida, a la hora de los vocales del turno judicial elegidos pertenecientes a las distintas asociaciones judiciales. Así, lo «normal» es que el PP proponga a jueces y magistrados pertenecientes a la mayoritaria Asociación Profesional de la Magistratura, mientras que las propuestas por parte del PSOE eran de miembros asociados a la hoy denominada Juezas y Jueces para la Democracia.

Se ha dado, de esta forma, la paradoja que la segunda asociación en número de jueces y magistrados, la Asociación Judicial Francisco de Vitoria no ha tenido prácticamente representación alguna en el Consejo, a pesar de prácticamente, doblar en el número de asociados a Jueces para la Democracia.

Y otro tanto, se puede decir respecto a los no asociados que presentan sus candidaturas para la elección de vocales. Prácticamente, pese a que casi el 50 por ciento de los jueces y magistrados no pertenecen a ninguna asociación, no tienen tampoco representación en el CGPJ en los elegidos por el turno judicial. Esta situación ha derivado que, tal como se refleja en la última encuesta del CGPJ, el 90% de los miembros de la Carrera Judicial defiendan la elección directa de esos 12 vocales.