Burdeos

El acusado de colaborar con ETA en Burdeos se justifica pero «no lo volvería a hacer»

El profesor jubilado francés que alquiló el piso en el que fueron detenidos en Burdeos cuatro etarras, entre ellos los presuntos jefes de la banda Francisco Javier López Peña, Ainhoa Ozaeta e Igor Suberviola, se justificó hoy ante el Tribunal de lo Criminal de París aunque dijo que "no lo volvería a hacer".

Louis Fort (81 años) explicó que alquiló ese apartamento en el centro de Burdeos, así como un aparcamiento próximo en agosto de 2007, "para hacer un favor"al etarra que se le había presentado unos meses antes como "Aitor", y que luego reconoció que era Suberviola. Pero puntualizó que no pensaba que allí se fueran a organizar acciones armadas.

"Me dije que si estaban en un apartamento tranquilo, iban a permanecer en calma", señaló este anciano asiduo de las manifestaciones de apoyo a ETA en el País Vasco francés al contar que había tomado la decisión de colaborar con ETA cuando se lo pidió "Aitor", y eso antes de que la organización terrorista hubiera anunciado el 6 de junio de 2007 que daba por finalizada su tregua.

Tanto la presidenta del tribunal, Jacqueline Audax, como el fiscal, Jean-François Ricard, le hicieron notar que su colaboración con ETA, que según su propia confesión se prolongó desde la primavera de 2007 hasta el arresto de los cuatro etarras el 20 de mayo de 2008, tuvo lugar en una fase de recrudecimiento de la acción violenta y de los atentados.

Y cuando Audax le recordó que el atentado en el aparcamiento de la T4 del aeropuerto de Madrid Barajas, el 30 de diciembre de 2006, en el que murieron dos personas, ya había, de hecho, dado al traste con esa tregua, el imputado respondió que los autores de esa acción habían advertido de que se tenían que evacuar las instalaciones.

Fort aseguró que cuando alquiló el piso de Burdeos a su nombre no sabía para qué se iba a utilizar, antes de añadir: "para mí era una casa de reposo".

Sobre las razones que había detrás de esos gestos de ayuda a la organización terrorista, alegó que él "siempre (ha) estado del lado de los débiles", que había quedado marcado por las "historias de torturas"de los activistas de ETA, y también por los relatos conocidos recientemente sobre niños secuestrados al nacer en hospitales del País Vasco español durante el franquismo y hasta los años 1980.

Además, aunque reconoció que "deploraba los muertos"causados por ETA, insistió en que "en paralelo ha habido 449 personas muertas por las fuerzas del orden o por grupos para-policiales en lo que llegó a calificar de "guerra".

Y que, en la cuestión vasca, los gobiernos españoles, "incluso los socialistas, han seguido el mismo camino que Franco".

Suberviola sólo aceptó intervenir para "confirmar"lo que había contado este colaborador sobre él, pero se negó a dar cualquier otro detalle.

Y, en la línea de tratar de exculpar en todo lo posible a este anciano, puntualizó: "en mis encuentros con Fort, nunca le hablé de mis actividades en ETA".

Antes de alquilar el piso franco de Burdeos para los etarras (por algo más de 500 euros al mes), Fort había hecho lo mismo con otra vivienda en la localidad de Seignosse, en las Landas.

En ese caso se trataba de una casa de vacaciones con cuatro habitaciones y piscina en el jardín por la que pagó 1.500 euros por una sola semana, del 30 de junio al 7 de julio de 2007.

La presidenta del tribunal quiso saber si ese chalé sirvió para reuniones del comité ejecutivo, y se dirigió en particular a Ozaeta en tanto que presunta responsable de las finanzas de la banda en esa época para preguntar cómo se justificaba ese gasto sabiendo que la tesorería de ETA atravesaba un mal momento.

"No tengo nada qué decir"fue la contestación de esta mujer, que como Suberviola está inculpada en tanto que dirigente terrorista, un cargo que también pesaba sobre López Peña, Thierry, hasta que murió el 30 de marzo del pasado año durante su encarcelamiento.

Junto a Ozaeta y Suberviola comparece también detenido en este proceso, que se inició el lunes pasado, acusado de 14 cargos el etarra Jon Salaberría, antiguo diputado autonómico de Batasuna.